El alcalde de La Victoria de Acentejo y candidato a la reelección, Haroldo Martín (CC), considera que la costa del municipio "debe salir del letargo en el que está sumida" y reclama que se permita a la localidad desarrollar proyectos de agroturismo, de bajo impacto ambiental, y vinculados con la recuperación de la agricultura en una zona que actualmente es un erial.

¿Cuál es su balance del mandato?

Ha sido bastante difícil porque nos hemos tenido que centrar en la gestión económica. Hemos pasado momentos delicados y teníamos que sanear el ayuntamiento por encima de todo. Esa ha sido nuestra principal tarea, pero sin olvidarnos del futuro y de conseguir buenos proyectos y financiación. Han sido gestiones paralelas. El ayuntamiento está saneado, tiene una liquidez de aproximadamente 2,5 millones, y en la actualidad en los bancos tenemos más de 4,5 millones de euros para proyectos que están en marcha o en redacción. A La Victoria le espera un futuro muy halagüeño. Las bases se han puesto en estos cuatro años.

¿Hay muchas diferencias económicas entre el ayuntamiento actual y el de 2015?

La diferencia económica es superimportante. Encontré un ayuntamiento endeudado hasta el cuello y dejo uno que económicamente respira muy bien. Este pueblo estaba paralizado por problemas políticos.

¿A qué proyectos se refiere?

Por ejemplo la residencia de mayores, donde ya se invierten 800.000 euros para habilitar 100 camas; el centro sociocultural de la Carretera Vieja, para el que hay otros 800.000 euros; la remodelación de la plaza Rodríguez Lara, que costará más de 1,5 millones y ya tiene proyecto; la demolición del antiguo cine para hacer un auditorio y, posiblemente, una biblioteca; también hay 500.000 euros para mejorar la casa Don Pedro Ramos; las dos rotondas de la carretera general, presupuestadas en 275.000 y 300.000 euros, o el asfaltado de la carretera general y sus márgenes, que dará un cambio importante. Hay mucho en ejecución y mucho por ejecutar.

¿Cuáles serían sus prioridades?

La residencia de mayores y la biblioteca. Y continuar con la reducción del paro, que ya ha bajado prácticamente a la mitad.

¿El próximo mandato será el de más obras de la historia local?

Sin lugar a dudas, el próximo mandato dará un gran impulso a La Victoria. Las bases están sentadas y será un mandato en el que este municipio tendrá un progreso considerable. Está todo a punto de empezar a ejecutarse.

¿El principal acceso del municipio a la TF-5 ha sido su gran quebradero de cabeza?

Empezó por una circunstancia desgraciada, que fue el derrumbe del muro del instituto; continuó con una obra que tuvo críticas de la oposición desde el minuto cero, pero, una vez terminada, ha tapado muchas bocas. Los vecinos están sumamente satisfechos con el resultado. Y tampoco nos hemos olvidado de los barrios ni de los agricultores.

¿La Victoria tiene futuro turístico?

Por supuesto. Y de lo más importante que hemos hecho en cuestiones turísticas es la apertura del Centro de Interpretación y Estudio de la Conquista. Algo que se complementa con los senderos y con nuestra apuesta por el turismo, con ideas como el hotel rural de la Casa del Deán Calzadilla, que ya dispone de un proyecto valorado en 800.000 euros. Y estamos en conversaciones para duplicar su capacidad.

¿Cuándo comenzará esa obra de la casa del Deán Calzadilla?

En el próximo mandato. Hay inversores turísticos interesados y ese proyecto será una prioridad.

¿Cuándo se acabará con todas las restricciones de consumo de agua por exceso de flúor?

Esa es otra cuestión que, con total seguridad, se resolverá a principios del próximo mandato. La obra ya está en marcha. El 80% del municipio recibe agua de alta calidad y solo resta el 20%, que se solucionará con la conexión de los depósitos de Marrero y Las lajas.

¿Han tenido alguna nueva respuesta sobre el proyecto de la depuradora comarcal?

Esta semana nos hemos reunido con el equipo jurídico y técnico que perfila la alegación al ámbito que nos afecta del Plan Hidrológico Insular. Ya presentamos en su día el aviso previo de la alegación, que es el trámite a seguir, y quedará registrada este mes. Hay otras alternativas y apostamos por la depuración natural.

¿Qué planes tiene para la costa?

La costa debe salir del letargo en el que está sumida. No nos dejan hacer absolutamente nada en la costa, y eso tiene que cambiar. La Matanza y Santa Úrsula han intervenido en su costa y nosotros, sin mirarnos en ese espejo, queremos desarrollar en la costa algún proyecto de agroturismo y un mirador emblemático. Ahí ya están previstos el estacionamiento disuasorio y el futuro intercambiador del tren del Norte. Queremos hacer algo con mucho cuidado.

¿Descarta el campo de golf?

En principio sí. Yo apostaría más por proyectos de turismo vinculados a la agricultura.