El déficit de agua de riego en la Comarca Nordeste de La Laguna debido a la falta de precipitaciones obligará a Balsas de Tenerife (Balten) a llevar a cabo la desalinización de agua regenerada para dedicarla al cultivo de la zona en la EDAR de Valle de Guerra. El objetivo de estas y otras acciones propuestas es, en última instancia, depender cada vez menos de aguas blancas para el riego. En este sentido, la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga), Balten y el Cabildo de Tenerife han mantenido varios encuentros en los últimos meses para buscar soluciones que contribuyan a paliar esta situación.

Este problema de la Comarca Nordeste de La Laguna debido a la falta de precipitaciones durante el pasado otoño e invierno también se repite en la Isla Baja y en Vilaflor, que son zonas con mayores necesidades hídricas en estos momentos. Por todo ello, se hace necesario poner en marcha, de manera urgente, medidas que contribuyan a evitar las restricciones durante el periodo estival, una situación que ya se produjo el pasado año y que puso en peligro la viabilidad de muchos cultivos, así como la rentabilidad de los agricultores.

El secretario general de Asaga, Javier Gutiérrez, afirmó ayer que "la situación, tanto en el norte como el sur, es preocupante desde el pasado mes de octubre". "A estas alturas del año ya no podemos esperar que llueva mucho más, por lo que no contamos con la posibilidad de que se recarguen", indicó, y consideró que "la situación es crítica" en estos tres puntos de la Isla. Ante la posibilidad de que vaya a peor, los agentes implicados han decidido iniciar una ronda de reuniones, con las que "esperamos poder encontrar soluciones entre mayo y junio porque, si en julio no ha cambiado la situación, es muy posible que se tengan que llevar a cabo restricciones", relató el secretario general.

En el caso de la Comarca Nordeste de La Laguna, la mayor parte de esta zona se abastece de la balsa de Valle Molina, que a fecha de 1 de abril se encontraba al 37% de su capacidad. De este modo, la solución que se propone es la puesta en marcha de la red de distribución en Tejina ?donde se ubican cerca de 900 hectáreas de cultivo?, que se abastece de agua regenerada de la EDAR de Valle de Guerra. Javier Gutiérrez recordó que será la primera vez que Balten llevará a cabo este proceso en la planta lagunera. Y es que esta EDAR cuenta con una de las tecnologías más avanzadas en materia de desalación y regeneración mediante el uso de membranas de ultrafiltración que garantiza la máxima calidad para el riego de vegetales de consumo en fresco.

A pesar de que Balsas de Tenerife ya se ha comprometido a llevar a cabo esta acción, en próximas reuniones se determinará la fórmula con la que se realizará el enganche de las fincas agrícolas a la red de agua. "Es necesario instalar una serie de llaves, por lo que este paso sería una especie de prueba piloto y aún hay que determinar cómo se financiaría esta instalación", relató el secretario general de Asaga.

No obstante, Gutiérrez matizó que "con este trabajo no se soluciona todo el problema, aunque sí es cierto que se mejora la situación". El objetivo es suministrar a los agricultores un agua de calidad, con un coste asumible. Así, se calcula que en el caso del proceso propuesto para Tejina, el precio del agua rondará los 40 o 45 céntimos el metro cúbico. "No es lo más barato pero creemos que si el proceso se va perfeccionando y somos capaces de llegar a un mayor número de fincas, el precio podría ir bajando".

En el caso de Isla Baja, la mayoría de las tierras de cultivo se abastecen de la balsa de Montaña de Taco, que a comienzos de mes estaba al 67% de su capacidad. "Se trata de unos niveles bastante bajos teniendo en cuenta la zona tan grande a la que suministra", indicó el secretario general de Asaga, quien añadió que esta situación puede estar afectando a unas 350 hectáreas tan solo en Buenavista. En este caso, se ha propuesto hacer una serie de obras en la desaladora La Monja para que uno de los dos módulos que se encuentra fuera de servicio en la actualidad entre en funcionamiento. Sin embargo, este proyecto conlleva la realización de diferentes obras a corto plazo para canalizar el agua entre el embalse y la planta desalinizadora, y que son necesarias proyectar de manera inminente.

Por último, en el caso de Vilaflor, el encuentro entre los agentes implicados del sector aún no se ha producido. No obstante, la balsa de Trevejos se encuentra al 31% de su capacidad, por lo que la idea es que se pueda intervenir para derivar parte del volumen de la balsa de Lomo del Balo, que a comienzos de mes estaba al 71% de su capacidad.

Javier Gutiérrez recordó que "las tierras de cultivo de Tenerife llevan años con problemas de disponibilidad de agua" y, aunque en zonas como la Isla Baja o Vilaflor no se está empleando agua regenerada en la actualidad, "esta sería la solución a largo plazo". De este modo, precisó que "el futuro de Isla Baja debe pasar por el agua regenerada para que exista un ciclo cerrado y, en Vilaflor, aunque la orografía no lo va a permitir al completo, la idea es que se emplee en al menos una parte".

El secretario general de Asaga afirmó que la situación es grave en toda la Isla porque existen cultivos que demandan una gran cantidad de agua. No obstante, Gutiérrez recordó que "en zonas como La Orotava o Puerto de la Cruz la disponibilidad del agua privada y la sobreexplotación de los pozos mejorar la situación".

las cifras

60% Volumen de agua. Las 22 balsas de Balten en la Isla presentaban un volumen de agua del 60% el 1 de abril.

67% Montaña de Taco. Esta balsa situada en Buenavista es la que cuenta con una mayor capacidad, con 821.739 metros cúbicos. A comienzos de año estaba al 67% de su capacidad.

31% Trevejos. La balsa de Trevejos, situada en Vilaflor, es una de las que se encuentra más vacía, con tal solo el 31% de llenado.