La Fiscalía Provincial reabre las diligencias que archivó el pasado mes de enero por el vertido de plomo al barranco de Ajabo derivado de la actividad del campo de tiro municipal de Adeje, ya que los mismos suponían, a su juicio, "un vertido incontrolado, sin que se haya producido un daño grave a los recursos naturales ni sean susceptibles de producir daños graves a la salud humana", valorando que "el daño al medio ambiente es reversible".

Un informe emitido por la Dirección General de Protección de la Naturaleza, dependiente de la Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, alude a la contaminación del suelo afectado por la actividad del campo de tiro y advierte de posible delito contra los recursos naturales y el medio ambiente. Ese documento motiva la medida adoptada por la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife.

La Viceconsejería de Medio Ambiente del Ejecutivo regional inspeccionó la zona y emitió un informe concluyendo, sobre la contaminación del suelo, que se registran valores superiores a los niveles genéricos de referencia establecidos para metales como el arsénico, antimonio y plomo, debido a los residuos de munición encontrados y se superan los valores de referencia de varios hidrocarburos aromáticos policíclicos y otros. Estas concentraciones son debidas a la gran cantidad de platos de tiro acumulados en la zona desde hace muchos años.

Asimismo, desde el punto de vista de la salud de las personas, determinó que hay "una situación de riesgo inadmisible para los viandantes" de la afección a los ecosistemas, el estudio concluye que podría darse una situación de riesgo potencial debido a las concentraciones de arsénico, antimonio, plomo y de los hidrocarburos aromáticos policíclicos.