Más de dos años han pasado ya desde que Genaro Padilla, director del CEIP Las Delicias, expresase que su último deseo antes de abandonar el centro, tras treinta años en él, era ver de nuevo en funcionamiento la piscina del colegio.

Cerrada desde 2006, la instalación espera por una reforma que nunca llega, a pesar de los intentos que se han hecho por parte de la dirección del centro durante los últimos años.

De hecho, el pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz aprobó en 2017 una moción en ese sentido -la presentó el grupo Socialista-, pero, desde ese momento hasta ahora, poco o nada se ha avanzado en este asunto.

Así lo reconoce el propio Padilla, quien ahora se aferra a una reunión que tendrá lugar la semana que viene como última oportunidad para poder ver cumplido su deseo.

La cita tendrá lugar en la Consejería de Educación, con miembros de este departamento regional, y a ella asistirán también miembros de la dirección del colegio y del consistorio de la capital.

"En este mes hay que buscar una solución". Esa será la consigna del director del CEIP Las Delicias, consciente de que puede ser la "última oportunidad" antes de las próximas elecciones para que las administraciones comprometan una partida presupuestaria que permita devolver el uso que tuvo la piscina durante mucho tiempo.

Padilla recuerda que el centro docente encargó hace años un proyecto de rehabilitación de la instalación, cuyo coste rondaría los 200.000 euros. También cuenta con el correspondiente informe sanitario favorable.

Ese proyecto contempla una reducción de la capacidad del vaso de la piscina principal de los 500.000 litros actuales a 150.000, con una profundidad máxima de 1,80 metros.

Sin embargo, aclara el director, el estudio de viabilidad que elaboró el ayuntamiento eleva hasta los 400.000 euros el gasto que supondría poner de nuevo en funcionamiento la piscina.

"Hay que intentarlo. La idea es que pudiéramos tener financiación a lo largo de este mes. Esperamos que este asunto no muera", enfatiza Genaro Padilla.

Fuentes municipales aclaran al respecto que, teniendo en cuenta el estado actual, lo que procede es proyectar una piscina nueva, cuestión que sería competencia del Gobierno de Canarias, desde la redacción del proyecto, la licitación y la ejecución de la obra.

En todo caso, las mismas fuentes indican que el ayuntamiento estaría dispuesto a "colaborar" financiando una parte de la misma "siempre y cuando se abriera al barrio, cuestión que ya conoce la dirección y los padres".

El director del CEIP Las Delicias ha insistido varias veces en que la piscina no solo tendría una vertiente deportiva, sino que también haría una gran función social en esta zona de la capital.