Los procesadores cuánticos son la gran promesa de la computación. Multiplicará la capacidad de realizar simulaciones complejas como las meteorológicas, permitirá romper la contraseña más segura que actualmente se esté utilizando en unos instantes y pondrá fin a uno de los pilares de la informática vigente desde 1965, la ley de Moore, que estableció los límites de crecimiento de la informática. Cuando se popularice la computación entrará en una nueva era en la que científicos, gobiernos y grandes empresas no quieren quedarse atrás.

IBM es una de las empresas que está invirtiendo en esta tecnología de forma más decidida. Durante el año pasado registró en Estados Unidos 9043 patentes, convirtiéndola durante 25 años consecutivos en la organización que más invenciones registra. La informática cuántica es una de sus líneas de investigación con mayor progresión debido al cambio radical que supone en la fabricación de ordenadores y sus componentes.

Dos años han pasado desde que IBM ofreció a cualquier persona y organización que tuviese una conexión a internet la posibilidad de utilizar gratuitamente un ordenador cuántico accediendo con un navegador web. Más de 60.000 usuarios han utilizado este servicio. Tres canarios participaron en el equipo de IBM que desarrolló la puerta de acceso que iba ser utilizada desde todos los rincones del mundo.

Actualmente la informática cuántica dirige sus primeros pasos hacia la comercialización de soluciones en la nube para empresas aunque el principal esfuerzo se está realizando en incrementar la investigación necesaria. Más de 100 personas, principalmente científicos, desde diferentes lugares del globo forman parte de la división de IBM Research de informática cuántica. La cuarta parte de este equipo son desarrolladores informáticos que están creando las herramientas que facilitan su uso. El equipo de desarrollo de Canarias también ha crecido y fundó la empresa Kainomi Solutions en mayo de 2017. El equipo de las islas está integrado en total por cinco canarios (Jorge Carballo, Francisco José Cabrera, Axel Hernández, Yeray Darias y Francisco Martín). Este equipo ha sido decisivo en una de las decisiones que estará en los libros de historia, los nombres de los cuatro ordenadores cuánticos de IBM disponibles de forma pública. la compañía ha denominado “Tenerife” a uno de ellos. El resto de procesadores llevan los nombres de “Austin” y “Yorktown”, lugares en el que se encuentra uno de los laboratorios de IBM; y “Rueschlikon”, enclave de la división de IBM Research en Suiza.

La utilización de los cuatro ordenadores cuánticos ha sido básicamente de naturaleza académica al participar 1500 instituciones universitarias, 300 institutos de educación secundaria y 300 entidades privadas. En la actualidad estos procesadores se están dedicando a “problemas de simulación química, simulación real de moléculas, gracias a la física cuántica, y el comportamiento cuántico de la naturaleza”, indicó Francisco Martín, líder del equipo de desarrollo en IBM Q y doctor en seguridad informática por la Universidad de La Laguna.