La Fiscalía pide 11 años de cárcel a un hombre por intentar matar a una camarera en Tenerife

La Fiscalía de Santa Cruz de Tenerife ha solicitado una pena de 11 años de prisión y el pago de 65.000 euros, más los gastos farmacéuticos ocasionados, a un hombre acusado de agredir con un cuchillo en el cuello a una camarera con la intención de acabar con su vida.

El procesado se encontraba en un bar y, tras ingerir diversas bebidas alcohólicas, comenzó a discutir con la trabajadora del establecimiento por el precio de una consumición y momentos después abandonó el local siguiendo a la víctima cuando se dirigía a su domicilio.

Tras llamarla por su nombre y sin previo aviso la abordó por la espalda y agarró del cuello, colocándole un cuchillo en el cuello con el que le efectuó un corte de 12 centímetros.

A consecuencia del ataque la mujer cayó sobre un banco, momento en el que el procesado intentó apuñalarla en el torso, lo que la víctima consiguió repeler mediante patadas.

Los gritos de la perjudicada alertaron a varias personas, entre ellas su esposo, y otros clientes del bar, quienes acudieron en su auxilio, redujeron al procesado y le quitaron el cuchillo.

Como consecuencia la mujer sufrió otra herida de 3 centímetros de largo y una más incisa más superficial en la parte izquierda del mentón, todo lo cual requirió de diversos tratamientos como suturas, analgesia, ansiolíticos, antidepresivos y psicoterapia.

Según la Fiscalía, la víctima presenta "claramente la sintomatología de un síndrome de estrés postraumático y continúa a la espera de valoración psicológica".

La agredida tiene síntomas de ansiedad, conductas evitativas, rumiación obsesiva, terror, ataques de pánico, insomnio, depresión, paranoia, hipervigilancia, y manía persecutoria, con afectación de todas las esferas de su vida cotidiana.

La mujer aún tiene estrés postraumático, una quemadura cutánea que afecta al 9% de su cuerpo y cicatriz en el cuello que debe cubrir con un pañuelo.

Como medida cautelar se acordó la prohibición de que el acusado se acerque a menos de 200 metros de la mujer y de comunicarse con ella por cualquier medio.