Investigan la muerte de un hombre en Tenerife
La Guardia Civil trata de determinar cómo se produjo el fallecimiento

Imagen de archivo de un guardia civil / El Día
El cuerpo sin vida de un hombre fue encontrado durante la tarde de este lunes en el municipio de Adeje. Y agentes de la Guardia Civil tratan de determinar las circunstancias en las que se produjo el fallecimiento.
El cadáver fue localizado en un barranquillo próximo a la localidad de Callao Salvaje, según explicaron las personas consultadas.
De forma concreta, el varón fallecido se hallaba en un pequeño cauce situado entre una estación de servicio, un antiguo centro deportivo y apartamentos y la carretera insular que enlaza Armeñime con Los Gigantes (TF-47).
Policía Judicial
Hasta el mencionado enclave acudieron diversos recursos de seguridad y emergencias, como agentes de la Policía Local de Adeje, integrantes de la Guardia Civil de Seguridad Ciudadana o profesionales del Equipo Territorial de Policía Judicial del Sur de Tenerife del Instituto Armado.
Además, un médico forense se desplazó al referido enclave para participar en el levantamiento del cadáver. El cuerpo fue localizado pasadas las 19:00 horas y supuestamente se hallaba en estado de descomposición.
Laboratorio de Criminalística
También acudieron integrantes del Laboratorio de Criminalística de la Guardia Civil, para realizar la inspección técnico-ocular, así como el informe fotográfico del lugar en el que se halló el cuerpo.
En un primer momento, se desconocía si la persona había sufrido una muerte natural, accidental o de tipo homicida.
El varón desaparecido
Los investigadores trabajan con la hipótesis de que el fallecido puede ser Carlos Andrés, de 45 años y que desapareció en Adeje el pasado 26 de febrero.
Un furgón fúnebre trasladó el cadáver hasta las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Santa Cruz de Tenerife, donde se le realizará la autopsia para conocer las causas reales del fallecimiento.
En las inmediaciones del lugar donde estaba la persona fallecida existe un antiguo centro deportivo y unos apartamentos, en los que actualmente viven ocupas. Sin embargo, anoche tampoco se sabía si el varón fallecido pertenecía a este grupo de personas o no.
Cabe recordar que en Callao Salvaje se produjo en abril del año pasado el asesinato de un matrimonio de ciudadanos belgas, Laura Trappeniers y Marc Olbrechts, por el que los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil detuvieron a tres compatriotas de las víctimas.
El cuerpo del varón nunca apareció. Y el cadáver de la mujer fue hallado en aguas de Arico, cerca del barrio de La Jaca y La Listada, en el sureste de Tenerife.
Laura tenía una bolsa de plástico en la cabeza y le faltaban las dos piernas y una mano. El día después del hallazgo de esos restos, dos de los ahora acusados, un padre y un hijo, salieron de Tenerife en un avión con destino a Bélgica.
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