La Fiscalía solicita 25 años de prisión para Abraham Z.A. como presunto autor de un delito de asesinato sobre su pareja sentimental, Ramona J.S.A., en una vivienda de Tenerife. Los hechos ocurrieron en septiembre del año 2020, cuando el individuo presuntamente introdujo a la víctima en la bañera, la roció con gasolina y la quemó.

Además, el Ministerio Público pide que el implicado, que hoy tiene 39 años, indemnice con 150.000 euros a cada una de las dos hijas de la mujer, de 51 años.

El acusado, que no tenía antecedentes hasta ese momento, mantenía una relación de afectividad con la afectada, con quien convivía en una vivienda de la Urbanización Princesa Yballa, en la zona de La Cuesta, en el municipio de La Laguna.

Horas antes del suceso, el hombre y la mujer habían mantenido una discusión, en la que le echó en cara que él la mantenía, por lo que tenía que obedecerle y cuidarlo. A las 3:30 horas de la madrugada, la introdujo en la bañera, sin que esta pudiera oponerse a tal acción, la roció con gasolina que había en el piso para mantener el grupo electrógeno que les daba electricidad y procedió a prenderle fuego.

Como consecuencia del citado episodio, la víctima sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en el 85% de su cuerpo, así como lesiones internas por inhalación de humo y por el calor, especialmente en las vías respiratorias.

Esa situación le causaron a la afectada un terrible sufrimiento y el presunto autor fue consciente del mismo. A pesar de la oposición del ahora acusado, la víctima logró salir del domicilio y pidió socorro. En su auxilio acudieron vecinos y agentes de las fuerzas de seguridad.

La mujer fue trasladada de forma inmediata a un centro hospitalario, pero falleció poco antes de las 12:00 horas del día siguiente en el Hospital Universitario de Canarias.

El acusado también sufrió quemaduras graves en el ataque mortal, por lo que fue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de un hospital y ese mismo día fue trasladado a un centro hospitalario de Sevilla. En diciembre del 2020, fue dado de alta y se ordenó su ingreso en prisión provisional por la autoridad judicial.

Según la investigación desarrollada por agentes de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional, que tomaron declaración a vecinos del bloque de viviendas donde ocurrió el asesinato, el ahora acusado había dado gritos en los que amenazó con matar y descuartizar a Ramona.

Además, en el momento en que era atendida y trasladada por el personal sanitario, la víctima señaló a su pareja como el responsable de las graves lesiones que sufría.