El Juzgado de Instrucción número 4 de Arona ordenó a mediodía de este sábado, 14 de mayo, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza para Ángel Martínez, el varón de 83 años acusado del asesinato de su mujer, Clotilde Rodríguez, durante la tarde del pasado miércoles en Los Cristianos.
El titular de dicho órgano, Nelson Díaz Frías, le imputa a dicho ciudadano vigués un delito continuado de maltrato y otro de asesinato con las agravantes de de alevosía (la víctima no tuvo opción de defensa), parentesco (era su esposa y madre de sus hijas) y género.
En los próximos días, dicho Juzgado se inhibirá en favor del Juzgado de violencia sobre la Mujer del citado partido judicial del Sur de Tenerife, según la información ofrecida por parte del Tribunal Superior de Justicia de Canarias.
El furgón policial con el arrestado llegó al Palacio de Justicia de Arona en torno a las 9:00 horas de este sábado. Los agentes trasladaron al presunto autor del crimen desde los calabozos de la Comisaría del Sur de Tenerife hasta el citado edificio e introdujeron el vehículo en el garaje del mismo.
Tal y como informó EL DÍA en su edición digital del pasado jueves, los investigadores de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría del Sur de Tenerife de la Policía Nacional recabaron informaciones en el entorno del matrimonio que permiten tener indicios de que Clotilde sufrió malos tratos físicos y psicológicos durante años por parte del ahora acusado.
Sin embargo, como la víctima nunca denunció ante los cuerpos de seguridad, al individuo no le constaban antecedentes policiales ni judiciales por violencia de género.
La víctima recibió varias heridas de arma blanca
Supuestamente, durante la tarde del pasado miércoles, Ángel Martínez le dio varias puñaladas a su esposa en el interior del domicilio en el que ambos pasaban largas temporadas de vacaciones en Los Cristianos, de forma concreta en un apartamento de la avenida Los Playeros, en las cercanías de la iglesia de Nuestra Señora del Carmen.
El crimen machista ocurrió en torno a las 16:00 horas del pasado miércoles en una de las viviendas de la primera planta del número 37 de la calle peatonal que enlaza la plaza central del núcleo con la playa, una de las vías más comerciales y con numerosos negocios de hostelería. Supuestamente, fue una vecina la que alertó a los servicios de seguridad y emergencias de que una mujer era atacada por su pareja.
Hasta el edificio Pepita acudieron policías locales de Arona y agentes de patrullas de la Policía Nacional. Cuando estos funcionarios llegaron al inmueble, Clotilde había fallecido tras recibir varias heridas de arma blanca, mientras que Ángel Martínez se hallaba a su lado. Él tenía unos cortes superficiales. Ante dicha circunstancia, el varón fue trasladado a Urgencias del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria (Hunsc). En dicho complejo sanitario recibió el alta a mediodía del pasado jueves. Fue entonces cuando los agentes de la Policía Nacional le leyeron sus derechos y le comunicaron, de forma oficial, que estaba detenido por la muerte violenta de su esposa.
La investigación de este crimen fue asumida por integrantes de la Unidad Familia Mujer (UFAM) de la Policía Nacional del Sur de Tenerife. Sus compañeros de Policía Científica realizaron la inspección ocular del apartamento en el que ocurrió el ataque y el informe fotográfico sobre el escenario del crimen.
Ángel Martínez era el único que figuraba en el buzón de su vivienda de Los Cristianos. Y eso ya da una primera idea de perfil de persona dominante. Tanto el ahora acusado como la víctima eran naturales del municipio de Redondela, en Vigo.
Hace algún tiempo decidieron pasar largas temporadas, medio año (otoño e invierno), en el citado pueblo costero de Arona, donde reside por motivos de salud una de sus hijas. Algunas personas de la zona explicaron el día después del asesinato que al octogenario, a veces, "se le iba la cabeza" a la hora de tratar a su mujer.
Vecinos y comerciantes del barrio de Teis, en el que vivía la pareja en Galicia, definen a Ángel como "impresentable, maleducado y muy machista". Sin embargo, para Clotilde solo tienen buenas palabras: "era una buenísima mujer", según los datos recogidos por Javier Rodríguez, del periódico Faro de Vigo, del mismo grupo editorial que EL DÍA.
El matrimonio tenía su domicilio en la calle Sanjurjo Badía. Los ciudadanos de la zona explicaron que la pareja siempre había tenido problemas por el carácter del hombre, a quien algunos definieron como "un chulo tremendo", que gustaba de ir descamisado y haciendo alarde de cadenas y sortijas de oro. Y también presumía entre sus paisanos de sus estancias en Tenerife. Según algunas personas consultadas, hace unos cinco años, Ángel comenzó a viajar en solitario a la Isla, mientras que Clotilde se quedaba en Vigo. Sin embargo, este año decidieron pasar juntos su estancia en Los Cristianos.
La pareja era muy conocida en el mercado del Berbés, donde regentaron un puesto de venta de pescado y marisco durante muchos años. Según Faro de Vigo, las compañeras vendedoras en dicho recinto, Clotilde "era la alegría del mercado" y entre los testimonios recabados solo hubo palabras de cariño. En la plaza de abastos del Casco Vello hubo momentos buenos y otros no tanto. Una de las mujeres consultadas aseguró que "en las épocas que peor estábamos, que menos gente había, ella era capaz de animarmos a todas. Se ponía a cantar y bailar y, al final, conseguía subirnos la moral".
Su capacidad de trabajo y sacrificio también llamaba la atención en el citado espacio comercial. "Tenía una obsesión por la limpieza envidiable y, además, era una de las que más madrugaba, antes de las tres de la mañana ya estaba en la lonja", explica otra de las mujeres. Y esa mezcla de buen carácter y esfuerzo le valía para tener una buena clientela.
Sin embargo, no lo tuvo fácil. Y para obtener un punto de venta en Berbés debió luchar. Antes de ser vendedora, cargaba pescado desde la lonja de ribera hasta los furgones que llevaban la mercancía al mercado. Pero cuando pudo ahorrar lo suficiente y se presentó la oportunidad de coger un puesto que quedó libre, no lo dudó.
Desde que existen estadísticas específicas de violencia sobre la mujer, en Canarias han muerto 99 mujeres a manos de sus parejas o exparejas, así como ocho niños y niñas. El pasado viernes, el presidente del Ejecutivo Autónomo, Ángel Víctor Torres, mostró la intención de dicha administración de no poner "el contador a cero" cada año en este ámbito y "seguir nombrando a cada una de las víctimas de violencia machista, mujeres y menores, pues lo contrario sería invisibilización y olvido".
