El policía local de La Laguna acusado por la Fiscalía de un delito de falsedad en documento público, en la medida en que atribuyó la denuncia por un coche mal aparcado en la calle Manuel de Ossuna a un guardia civil de Tráfico que no tenía nada que ver con dicho vehículo, aseguró ayer en el juicio que «fue un error» a la hora de apuntar los datos en otro boletín de multa.

Según consta en la instrucción, los hechos comenzaron el 17 de octubre del 2017. El guardia civil de Tráfico aparcó mal su moto y dicho policía local lo multó y le dejó una copia del boletín en dicho vehículo. Cuando se iba a marchar del lugar, llegó el guardia civil de Tráfico dueño de la moto, que dejó al policía local sus datos personales, reconoció que estacionó sobre una acera y se merecía la multa, que pagó a los pocos días.

Dicho agente de la Agrupación de Tráfico hizo un viaje a la Península entre el 18 y el 26 de octubre. La multa que originó el procedimiento se produjo cuando le implicado le atribuyó otra sanción por un Mercedes aparcado sobre un paso de peatones en la calle Manuel de Ossuna. Pero ese vehículo no es suyo ni de un familiar ni de un amigo, como demostró con un documento de la Jefatura de Tráfico. Y cuando se puso la denuncia al citado Mercedes, el 24 de octubre, tampoco estaba en Tenerife.

Ante los magistrados de la Sección VI de la Audiencia Provincial, el agente de la Policía Local de La Laguna aseguró que atribuir la denuncia por el Mercedes mal estacionado «fue un error» a la hora de anotar los datos personales del guardia civil de Tráfico. Supuestamente, en vez de anotarlos en la multa por la moto del funcionario, los apuntó en una denuncia anterior, que se correspondía supuestamente con la del Mercedes.

El acusado señaló que en el boletín por la moto sobre la acera no figuran los datos de su propietario. Y, sin embargo, sí los registró en el del Mercedes, a cuyo propietario no identificó en el momento de tramitar la denuncia. Y, supuestamente, a la hora de remitir dicha documentación al Negociado de Multas del Ayuntamiento lagunero no se percató del error ni de la coincidencia de nombres.

El acusado sorprendió al fiscal y a la abogada de la acusación, Begoña Fleitas, con una nueva versión ayer, que consistió en que, en realidad, la denuncia a la moto no la hizo el 17 de octubre, sino el 27 de dicho mes. Es decir, varios días después de que, previamente, hubiese registrado el estacionamiento del Mercedes sobre un paso de peatones.

Tanto el fiscal como la letrada de la acusación le recordaron que ha faltado a la verdad y ha ido cambiando de versión a lo largo del proceso, en función de las pruebas que salían a la luz. En un determinado momento, atribuyó el error al Negociado de Multas. Pero el personal de dicha área negó tal posibilidad. En la última declaración en el Juzgado expuso ya que fue un error a la hora de anotar los datos del dueño de la moto. Sin embargo, hasta ayer no había dicho que la fecha en que denunció al agente por la moto fue el 27 de octubre.

Además, según la abogada de la acusación particular, en un informe remitido a la subcomisaria jefa de la Policía Local de La Laguna, Elena Delgado, el agente municipal acusado aseguró que la denuncia a la moto la puso el 17 de octubre.

El guardia civil de Tráfico también se sintió molesto por el hecho de que el policía local subiera la fotografía de su motocicleta mal estacionada a un grupo de whatsapp de agentes municipales y guardias civiles.