Un padre no irá a la cárcel pese a reconocer zarandear a su bebé hasta dejarlo inconsciente en Zaragoza

El condenado conmutará la pena de dos años de cárcel por cuatro meses de trabajos en beneficio de la comunidad

El bebé ingresó inconsciente en el servicio de urgencias del Hospital Miguel Servet de Zaragoza.

El bebé ingresó inconsciente en el servicio de urgencias del Hospital Miguel Servet de Zaragoza. / ÁNGEL DE CASTRO

L.M.G. / A.T.B.

Inconsciente, hipotónica, arreactiva, con respiración espontánea superficial y pupilas mióticas. Un bebé de tres meses ingresó en este estado en la UCIdel Hospital Miguel Servet de Zaragoza en abril del año pasado, víctima de los fuertes zarandeos que le había propinado su propio padre. Ahora, el progenitor, identificado como Edilson Tavarez y de nacionalidad dominicana, ha reconocido los hechos y ha aceptado una condena de dos años de cárcel a tenor del acuerdo alcanzado ayer entre la Fiscalía del Juzgado de lo Penal número 9 de Zaragoza y de su abogada Carmen Sánchez Herrero. Sin embargo, no ingresará en prisión, ya que se le va a conmutar la pena por cuatro meses de trabajos en beneficio de la comunidad. Inicialmente afrontaba dos años y seis meses de cárcel por un delito de lesiones graves a petición del ministerio fiscal.

El bebé sufre ahora las secuelas del conocido como síndrome del niño zarandeado y, aunque todavía se desconoce el alcance concreto de las lesiones, son claras la grave afectación visual y psicomotriz y la encefalopatía epiléptica. De momento, el cuadro patológico que presenta la niña "no se encuentra estabilizado".

Los hechos se remontan a la noche del 12 de abril de 2022 en el barrio Delicias de la capital aragonesa, cuando el ahora condenado perdió los nervios con su hija y comenzó a zarandearla fuertemente durante unos minutos hasta que perdió el conocimiento. Fue en ese momento cuando decidió trasladarla al servicio de urgencias del Miguel Servet, donde permaneció ingresada algo más de dos semanas hasta el día 29. No fue su última estancia en dicho centro hospitalario, ya que tres meses después volvió a ingresar por un cuadro de crisis epiléptica.

El progenitor ya ha había sido condenado con anterioridad por el Juzgado de Instrucción número 6 de Blanes, el Juzgado de lo Penal número 1 y número 2 de Arenys de Mar por conducir sin permiso, violencia doméstica y de género y resistencia a la autoridad.