Un hombre, de nacionalidad española y con antecedentes, fue detenido el pasado martes en València cuando trataba de robar en el interior de una furgoneta. Al ser sorprendido por la policía, el presunto delincuente se revolvió y trató de escapar agrediendo a los agentes con un espray de pimienta. Sabía que si lo identificaban acabaría entre rejas, ya que su suegra lo había denunciado unos días atrás por violarla y estaba siendo buscado por la Policía Nacional.

El presunto violador fue detenido por la agresión sexual a la madre de su compañera sentimental, con la que tiene un hijo en común, ocurrida el pasado 22 de octubre en un domicilio del distrito de Abastos, así como por los delitos de tentativa de robo con fuerza, atentado a agente de la autoridad y contra la salud pública –ya que en el momento de su arresto portaba encima varias papelinas supuestamente preparadas para su venta–. A todos estos delitos se suma una requisitoria que tenía pendiente de un juzgado de Llíria por tráfico de drogas y lesiones. 

El juez ha acordado su ingreso en prisión provisional por la agresión sexual a la mujer, de 45 años

El acusado alegó ante el juez que la denuncia de su suegra, de unos 45 años, responde a un supuesto interés para quedarse con la casa en la que reside su hija. No obstante, el forense apreció en la víctima marcas en los brazos compatibles con los hechos relatados, de haber sido sujetada por la fuerza. El juzgado de Instrucción número seis de València acordó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin posibilidad de fianza.