La Policía Nacional conocía el paradero de los autores del atraco mortal al bingo de Tortosa, en el que murió una empleada de cincuenta años, porque seguía a esta banda desde Tortosa. También la Guardia Civil estaba al corriente de su actividad. Pero no así los Mossos d'Esquadra.
Los integrantes de este grupo habían atracado otros bingos y establecimientos comerciales en Navarra y desde entonces estaban siendo investigados por los cuerpos estatales, que sabían que se encontraban en esta localidad del sur de Cataluña.
Cuando la madrugada de este lunes tres encapuchados asaltaron el bingo Vali Park, ubicado en la plaza de la Corona d'Aragó de Tortosa, la Policía Nacional dedujo que debían de tratarse de los mismos sospechosos e informó a la policía catalana, que pudo armar un dispositivo para arrestarlos transcurridas pocas horas de lo sucedido.
Tres arrestados en libertad
Los Mossos arrestaron en el operativo activado tras el aviso de la Policía Nacional a cinco personas en el centro de Tortosa. Pero este martes a las once de la mañana ha dejado en libertad a tres de ellas. La operación se mantiene abierta y no se descartan nuevas detenciones.
Según La Vanguardia, uno de los tres encapuchados implicados pudo huir y ha cruzado la frontera a Francia. Las tres personas cuya detención los investigadores catalanes han dejado sin efecto no estarían, al parecer, vinculadas directamente con el asalto al bingo, en el que además de morir asesinada una mujer, otro hombre, uno de los pocos clientes que en la madrugada de este lunes se encontraba en el establecimiento cuando fue atacado, recibió un disparo del que se recupera a pesar de la gravedad.
Planeaban un robo
Los investigadores mantienen como principal hipótesis de los trágicos hechos ocurridos en el bingo Vali Park que los autores pretendían únicamente robar en el establecimiento pero perdieron los nervios durante el asalto y acabaron abriendo fuego. Aunque ha sorprendido a los agentes la extrema violencia que utilizaron, llegando a asesinar a la trabajadora del bingo –para quedarse con el botín de un modesto bingo de Tortosa–, la trayectoria de los delincuentes en Navarra indica que hasta ahora no habían usado una fuerza tan desproporcionada en sus asaltos.
En realidad, el debate ahora se centra sobre esa cuestión: ¿Si estaban siendo investigados policialmente por podría haberse hecho algo más para evitar la muerte de la trabajadora?
