Domingo Faustino Verna es un hombre, de 77 años, que vive en la ciudad argentina de Bahía Blanca y está acusado de cometer un crimen salvaje: matar a balazos a su propio nieto después de que mantuviera una violenta discusión en la entrada de su casa. Pese a este fatal suceso, la Justicia tuvo en cuenta la avanzada edad del presunto homicida y lo dejó en libertad, aunque mantiene la imputación en su contra.
El violento asesinato ocurrió el lunes en horas de la tarde en una vivienda ubicada en la calle Cobián al 600 y quedó registrado por la cámara se seguridad de la propiedad.
En las imágenes se ve cómo un joven, identificado después como Brian Verna (29 años), se dirigió a la entrada de la casa de su abuelo con un palo en la mano y con la clara intención de golpearlo. Detrás suyo venía una mujer que intentó por todos los medios impedir la agresión. Se le colgó de las piernas al joven, le tiró de la ropa, pero no hubo manera de detenerlo.
El nieto estaba dispuesto a todo y atravesó la reja, que estaba abierta, pese al peso de la mujer que colgaba de su cuerpo. Se acercó a su abuelo y comenzó a darle golpes, tras llegar a su domicilio a bordo de una bicicleta sin entender por qué su familiar lo agredía.
Verna nieto arrinconó al abuelo contra la puerta de la casa y continuó dándole golpes. La mujer que había tratado de intervenir en un principio, se puso de nuevo en medio de los dos hombres, mientras que Brian le daba más y más golpes a Domingo. Finalmente logró separarlos con insultos de por medio pero nunca imaginó la tragedia que se desencadenaría poco tiempo después.
Eran las 16:34 horas. Solo habían pasado cinco minutos de este violento encuentro cuando Brian regresó a la casa de la calle Cobián. Esta vez, Domingo ya estaba dentro de la propiedad. No obstante, el joven volvió a descargar su furia contra la puerta de la vivienda, dándole patada tras patada para llamar la atención de su abuelo hasta que de repente se abrió la puerta.
Tal y como se ve en la filmación, fue el propio abuelo el que la abrió, sacó un arma corta y le disparó casi a quemarropa en la zona del abdomen a su nieto sin mediar ningún tipo de palabra. Esta vez, el que se llenó de furia fue el propio Domingo Verna. Brian al sentir los primeros disparos se movió un poco a su izquierda y cayó herido de gravedad sobre un pequeño jardín.
Finalmente, la víctima recibió cinco impactos de bala.
