La Guardia Civil, con la colaboración de la OFAST (Office anti-stupéfiants) de la policía francesa y la coordinación de Europol, ha desmantelado una organización criminal que supuestamente traficaba con hachís y marihuana, introduciendo la droga a través de helicópteros, y blanqueaba el capital obtenido de manera ilícita.

La organización compuesta por ciudadanos franceses adquiría la droga en Marruecos y Andalucía y posteriormente la transportaba hasta Francia mediante su ocultación entre la carga legal de camiones de gran tonelaje o mediante el método Go fast, utilizando vehículos con placas de matrícula falsa, han informado desde la Guardia Civil.

En la operación, denominada 'COPA-SUCRE', se han detenido a once personas, una de ellas por la policía francesa. Hay otras nueve pendientes de arrestar en Francia con órdenes europeas de detención y se ha conseguido incautar más de 2,4 toneladas de hachís y 112 kilogramos de marihuana.

La investigación se inició en 2020, cuando la Guardia Civil y la OFAST detectaron la actividad de la organización francesa en el sur de España. A raíz de la investigación se descubrió la presencia de varios miembros del grupo que utilizaban numerosos vehículos y se descubrió la entrada ilícita sin plan de vuelo de un helicóptero en las costas andaluzas que procedía de Marruecos, siendo posteriormente identificado un miembro de la red que transportaría envoltorios de fardos de hachís.

A través del seguimiento de los vehículos detectados y los miembros de la organización radicados en la provincia de Málaga, la Guardia Civil localizó a uno de los investigados que utilizaba documentos de identidad falsos, llegando a detectar a dicho individuo hasta cinco identidades distintas y todas ellas falsas.

Los agentes comprobaron que varias personas realizaban actividades sospechosas y tomaban numerosas medidas de seguridad en sus desplazamientos en vehículo. Tras varios días de vigilancia, se detectó cómo interactuaban con un camión con matrícula francesa, por lo que fue interceptado en Narbona y al inspeccionar la carga se encontraron en su interior, entre la carga legal que transporta, 419 kilogramos de hachís, deteniendo al conductor del camión.

Continuando con la investigación de los miembros de la red, la Guardia Civil consiguió la aprehensión de otros 327 kilogramos de hachís en Baza (Granada) en el interior de un vehículo con placas dobladas que venía siendo perseguido.

Posteriormente, los agentes detectaron otra operativa de narcotráfico y lograron la aprehensión de 860 kilogramos de hachís en Chauchina (Granada), que ocultaban entre la carga legal de un camión que había salido de otra nave industrial controlada por la organización investigada. También se les incautaron 112 kilogramos de marihuana en Port Bou (Gerona) en otro vehículo utilizado por miembros de esta organización.

Imagen aérea de uno de los registros efectuados en la Operación Copa-Sucre. L. O

A comienzos de julio, y en una acción adelantada por La Opinión de Málaga, diario que pertenece a este grupo, Prensa Ibérica, la Guardia Civil detectó un alijo de drogas realizado con un helicóptero en Torremolinos, donde fueron aprehendidos 211 kilogramos de hachís y la aeronave que los transportaba, que había viajado sin plan de vuelo establecido hasta el vecino país de Marruecos. En Marbella, los investigadores también detectaron un supuesto transporte de drogas a bordo de un turismo con placas de matrícula falsa, que tras visitar una vivienda de dicha ciudad, partió en dirección a Málaga.

Según han indicado desde la Guardia Civil en un comunicado, se organizó entonces un dispositivo policial con agentes uniformados para detener al vehículo sospechoso y al darle el alto, momento en el que el vehículo eludió el control policial, intentando atropellar a uno de los agentes que tiene que esquivarlo para evitar ser atropellado, pero consigue hacer uso de los medios de bloqueo pinchando una rueda del vehículo.

A pesar de ello, y de que circulaba solo con la llanta en una de las ruedas, alcanzó una velocidad superior a 180 kilómetros por hora, llegando incluso a embestir a uno de los vehículos policiales.

Finalmente, tras una colisión lateral con el vehículo policial, se consiguió detener al conductor, hallándose en el interior del vehículo 329 kilogramos de hachís en seis fardos y numerosos paquetes. En la casa de la que salió este vehículo, tras realizar un registro con autorización judicial, fueron incautados otros ocho fardos más de hachís que alcanzaron un peso de 266 kilogramos, procediendo a la detención de tres personas.

Otro de los delitos esclarecidos es el blanqueo de capitales, ya que la organización investigada utilizaba el dinero proveniente del tráfico de drogas para financiar la logística necesaria, entre ella los medios de transporte incautados, y ocultaba su verdadero origen mediante el uso de empresas ficticias.

Una vez identificados el resto de los miembros de la organización se solicitan al juzgado siete entradas y registros en las provincias de Cádiz, Málaga, Almería y Castellón. En los registros, se intervienen tres helicópteros, cuatro armas de fuego, abundante munición, chalecos antibalas, y numerosos dispositivos electrónicos que utilizaban para evitar la acción policial.

Finalmente, en la operación se han detenido a once personas, una de ellas por la policía francesa. Hay nueve personas pendientes de detener en Francia con órdenes europeas de detención y se ha conseguido incautar más de 2,4 toneladas de hachís y 112 kilogramos de marihuana.