Integrantes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional detuvieron a cuatro jóvenes, que tienen entre 20 y 25 años de edad como presuntos autores de los delitos de detención ilegal (secuestro), extorsión, robo con violencia o intimidación y lesiones leves. A todos los acusados les constan antecedentes policiales. Los hechos comenzaron en el barrio de San Matías, en el municipio de La Laguna.

El trabajo de los investigadores del cuerpo de seguridad se inició después de recibir la denuncia de la víctima, que es un hombre de 21 años. En su comparecencia ante los funcionarios, el afectado relató que, a mediados de julio, sobre las 11:00 horas de la mañana, cuatro individuos obstaculizaron el paso del vehículo que conducía. Y a continuación los autores del asalto se subieron en el turismo a la fuerza. A continuación, el citado conductor fue retenido durante más de 15 horas, hasta que logró escapar durante la madrugada del día siguiente.

Intimidación y golpes

En ese periodo de tiempo, mientras era conducido a diferentes puntos de la isla, los delincuentes lo intimidaron y golpearon para que accediera a sus pretensiones.

Según la información ofrecida en la jornada de ayer por parte de la Comisaría Provincial del cuerpo de seguridad, los individuos obligaron a la víctima a solicitar créditos on line en su beneficio. Sin embargo, según las fuentes consultadas, los ladrones no lograron ese objetivo y las peticiones de préstamos se quedaron en simples tentativas.

Además, los ahora detenidos se apoderaron de todas las pertenencias del afectado, como teléfono, gafas de sol, reloj, ropa y calzado.

Una semana antes, el denunciante ya había sufrido una agresión similar, presuntamente llevada a cabo por dos de los cuatro jóvenes ya citados. Sin embargo, por miedo a las represalias, en aquella ocasión no denunció.

Efectos del perjudicado

Gracias a las averiguaciones practicadas, los profesionales del Grupo de Homicidios de la Brigada de Policía Judicial identificaron plenamente a los presuntos autores. En el momento de su detención, a los implicados se les intervinieron efectos personales de la víctima que los relacionaban con los hechos investigados.

Los apresados, junto al atestado realizado al efecto, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial competente, que determinó su ingreso en el centro penitenciario Tenerife II a la espera de la celebración del juicio.