Hubo menos fugas en el Archipiélago, pero las indemnizaciones se incrementaron. El confinamiento por la pandemia del Coronavirus que se produjo el año pasado, que motivó una reducción drástica de la circulación de vehículos, provocó una disminución de aquellos conductores que abandonaron el lugar del accidente sin dar el parte, pero se incrementó el gasto que generaron en el Consorcio de Compensación de Seguros.

Los datos publicados por la empresa publica detallan que en el Archipiélago las fugas se redujeron de 83 a 64 entre 2019 y 2020, pero el desembolso que se hizo para cubrir los daños provocados pasaron de 472.999 a 551.670 euros. Esta situación también se produce en Aragón, aunque de manera más acuciada al aumentar de 133.617 a 386.433 euros. Ambas regiones son las únicas que registran incremento porque en el resto, y en el cómputo general del país, se produce un importante descenso, tanto de accidentes (de 1.691 a 1.141) como de indemnizaciones, que se reduce a casi la mitad, de 16,7 a 8,5 millones.

En cuanto a los vehículos sin el seguro de responsabilidad civil obligatorio, las estadísticas también indican una disminución del 28% debido a los meses duros de la pandemia.

Así, si en 2019 se registraron hasta 9.161 casos, el pasado año se redujeron hasta los 6.541, que en términos económicos por indemnizaciones se vio reflejado en una disminución de 32,5 a 30,2 millones.