La magistrada titular del Juzgado de Instrucción número 3 de La Laguna ordenó ayer el ingreso en prisión preventiva del hombre de 49 años de edad detenido en la noche del lunes como presunto autor de la muerte violenta de su tía Josefa en una vivienda situada en el Camino Pista Militar, en La Laguna. La autoridad judicial lo investiga por un delito de asesinato.

Durante la toma de declaración en el Palacio de Justicia situado en la plaza del Adelantado, el acusado reconoció ser el autor del violento ataque a la octogenaria.

Ante las diversas pruebas e indicios recogidos por los investigadores de la Policía Nacional en el lugar de los hechos y el testimonio del implicado, la magistrada decretó la prisión provisional, comunicada y sin fianza para el mismo.

El varón apresado por el Grupo 2 de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría de La Laguna es un consumidor habitual de sustancias estupefacientes. En base a la información que trascendió ayer, el ahora investigado fue denunciado por su propia madre. Y, tras enfadarse con dicho familiar, decidió empezar a vivir en los cuartos de la azotea de la vivienda de su tía Josefa, más conocida como Pepita entre los vecinos, de 82 años y natural de Tacoronte. Ese cambio de residencia se produjo hace aproximadamente un año. Sin embargo, la mala relación entre la octogenaria y su sobrino era más que evidente, en base a los insultos, amenazas y faltas de respeto sufridos por la víctima de este caso de violencia doméstica.

Casi todos los residentes en las proximidades de la casa de la persona asesinada la recuerdan paseando a su perro cada día. Por eso se extrañaron cuando no la vieron ni el domingo ni el lunes. Los policías nacionales accedieron a su domicilio en la noche del 31 de mayo y hallaron el cadáver en una de las habitaciones de su casa, tapada con una sábana. Había sufrido diversas heridas de arma blanca y también varios golpes en el rostro.

Pepita llegó a vivir al Camino Pista Militar hace un cuarto de siglo. Al poco tiempo se quedó viuda y, durante muchos años, trabajó en la limpieza de viviendas. Residía sola y tenía contacto con una sobrina que reside en Santa Cruz de Tenerife. Además, había contratado un servicio para la limpieza de su domicilio, a pesar de que todavía se valía por sí misma. También había hablado con una vecina para que pasara horas con ella y le hiciera compañía.