Vecinos que viven entre El Retamar y Tamaimo, en las medianías de Santiago del Teide, se sorprendieron cuando pasadas las 19:00 horas del sábado empezaron a escuchar ruidos procedentes de una finca próxima. Unas horas después, dos de ellos llamaron a la Policía Local santiaguera. Alertaban de la celebración de una fiesta, con música alta y la asistencia de un nutrido grupo de personas. Los agentes municipales no se esperaban tantos asistentes como los que se encontraron, al menos 30. Tuvieron que pedir refuerzos a la Guardia Civil de Guía de Isora y esta, a su vez, al puesto de Playa de Las Américas, en el municipio Arona.

La operación se saldó con 30 expedientes de sanción por no respetar las normas anticovid y cuatro detenidos por resistirse a la autoridad. La decena de agentes actuantes se encontraron con al menos 30 personas, algunas con disfraces, bailando sin mascarillas, sin repetar las distancias de seguridad y vulnerando el tope de asistentes a una reunión, que actualmente es de seis con el nivel 2 en el que se encuentra Tenerife. En su mayoría, eran ciudadanos europeos –alemanes, franceses e italianos– que tienen su residencia en la Isla.

El concejal de Seguridad de Santiago del Teide, Ibrahim Forte, lamenta no solo el incumplimiento de los protocolos sanitarios en este caso, sino que algunos asistentes a la fiesta se encararan con los agentes de la Policía Local y la Guardia Civil que acudieron a la finca de El Retamar. “No solo se pusieron en peligro a sí mismos y a los agentes, sino que algunos mostraron una actitud desafiante. Como si las medidas sanitarias fueran una broma... Tenemos que ser severos con este tipo de actitudes”, dejó claro Forte, que informó de que las cuatro personas que ofrecieron más resistencia a las órdenes de que cumplieran con las normas sanitarias fueron detenidas. Se les acusa de resistencia a la autoridad, además del expediente sancionador por saltarse los protocolos. Las sanciones por este último incumplimiento pueden llegar a los 600 euros.

Lo que no se saltaron los asistentes a la fiesta de disfraces fue el toque de queda fijado a las 23:00 horas, pero porque el operativo llegó pasadas las 20:00 horas, poco después de que los dos vecinos llamaran a la Policía Local. La fiesta se desarrollaba en una amplia finca, tanto en el exterior como en el interior.

No fue la única celebración en la que tuvieron que intervenir el fin de semana los cuerpos de seguridad. En Lanzarote, la Policía Nacional y la Autonómica localizaron a decenas de personas, la mayoría de nacionalidad dominicana, que celebraban en las calles de la capital, Arrecife, el 177 aniversario de la independencia de su país. Las imágenes de un vídeo, difundido en las redes sociales, en las que aparecían los festejos por las calles de Arrecife obligó a intervenir a los agentes.

Se calcula que había más de 200 personas, en una caravana de decenas de vehículos. El digital Lancelot informó ayer de que más de exactamente fueron 150 los vehículos que circularon por las calles de la capital conejera y terminaron en una concentración, presuntamente sin autorización, en la explanada del Recinto Ferial, frente a la sede del Cabildo de Lanzarote.

A pesar de las insistentes advertencias de las autoridades y de las medidas contra este tipo de festejos que incumplen las medidas de seguridad sanitaria, siguen llegando noticias de actuaciones policiales.

El anterior caso ocurrió en La Laguna la madrugada del viernes al sábado. Agentes de la Policía Local de La Laguna desalojaron a más de 50 personas que estaban celebrando una fiesta en otra finca, en concreto en la zona de Garimba, en Guamasa. Los agentes se encontraron a la mayoría de los 50 asistentes en estado de embriaguez y sin respetar las restricciones de seguridad que marca la normativa sanitaria.