Una investigación, abierta por la Guardia Civil, determinará si la denuncia puesta por una vecina de Valsequillo, en la que se asegura que dos ciudadanos de origen extranjero le habían apedreado y luego propinado una paliza, es falsa. La descripción de las heridas detalladas en el informe médico apunta hacia una caída accidental que a una agresión.

La presunta víctima aseguró que dos hombres se dirigieron a ella gritándole en árabe y que después, sin mediar más palabras, empezaron a tirarles piedras, alcanzándole una de ellas en la parte trasera de la cabeza.

La denunciante en ese momento decidió aumentar el paso, pero, siempre según su versión, los jóvenes empezaron a agredirla y le pegaron una patada cuando estaba en el suelo. La herida aseguró que dio a uno de ellos con un cuchillo para cortas las plantas que llevaba. Esto, sin embargo, no amainó la violencia de los dos jóvenes, que según ella abandonaron el lugar después de propinarle “una fuerte patada en la cabeza”.

Los hechos ocurrieron el viernes, 22 de enero, a las 17.30 horas en el barranco de Valsequillo. La mujer acudió a las dependencias de la Guardia Civil al día siguiente, a las 19.47 horas, para presentar la denuncia y el parte de lesiones en el que se indica: “Se aprecia contusión en ambas mejillas de la cara, así como en la mano derecha, además de con múltiples lesiones, erosiones lineales en ambos antebrazos, en el tórax, incluyendo las mamas, así como en el tronco, muslos y en la espalda. No se aprecia lesión física”. Y la remita al Hospital Insular “para su mejor valoración por el trauma en la mano derecha y en la mejilla derecha”.

Las fuentes consultadas apuntaron que esta descripción apunta más hacia una caída accidental que a una agresión física, por lo que la Guardia Civil ha abierto una investigación para determinar la veracidad de lo declarado. En caso de que se determine que la denuncia es falsa, la mujer se podría enfrentar a una pena de prisión de entre tres meses y dos años si es considerada como muy grave.

La mujer aseguró después de lo ocurrido que: "No soy de peleas, ni tampoco racista, pero tampoco sé como saqué el valor para defenderme cuando me empezaron a lanzar piedras los magrebíes".