Miembros de la Policía Nacional detuvieron en la jornada de ayer al bailarín y coreógrafo Rafael Amargo en una operación contra una organización criminal dedicada al tráfico de drogas. Amargo fue arrestado en un operativo que continúa abierto y en el que, por el momento, se ha apresado a otras tres personas.

La operación esta bajo secreto de sumario por orden de la autoridad judicial, si bien las fuentes explicaron que el mencionado artista está, en principio, imputado por un delito de pertenencia a organización criminal y otro de tráfico de sustancias estupefacientes.

Rafael Amargo permanece en dependencias policiales, en concreto en los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional de Centro, en la calle Leganitos de la capital. Se da la circunstancia de que Rafael Amargo tenía previsto estrenar “Yerma” en el Teatro La Latina, en Madrid, mañana, en una revisión muy personal de la mencionada obra de García Lorca.

Una gala amarga

El nombre de Amargo está vinculado al Carnaval de Tenerife desde 2007, cuando fue contratado para dirigir la gala en una edición que estuvo dedicado a la moda.

El que fuera entonces gerente de la organización deja entrever en una novela que la decisión de su designación era una cortina de humo del entonces alcalde de la capital tinerfeña, Miguel Zerolo, al proceso de judicialización del caso Las Teresitas y a los intentos del abogado Felipe Campos de lograr la suspensión del Carnaval en defensa de los vecinos de la zona centro, harto de los ruidos. Solo un dato: el mismo día que se presentaba el cartel anunciador 2007, obra de Karim Rashid, la portada del EL DÍA tituló: “La fiscalía pregunta si Zerolo está aforado”.

El entonces responsable de Fiestas tomó la decisión de cerrar la etapa de Jaime Azpilicueta y apostar por Rafael Amargo porque entendía que el director madrileño “era un coche viejo con motor nuevo”. La decisión de contratar al coreógrafo granadino, nacido en 1975, obedecía también a una fórmula administrativa para sortear la maltrecha situación económica de la organización; así, se subcontrataba la producción artística a la empresa de Amargo para evitar la falta de liquidez.

En la primera entrevista que concedió el 6 de noviembre de 2006, Rafael Amargo declaró: “Quiero grabar la gala en los corazones de los tinerfeños”; y no se equivocó porque logró grabarla, tal vez más en la mente.

No había llegado el Carnaval, ni siquiera la Navidad, y Bruno Piqué, que se había presentado como la joven promesa que aspiraba a suceder a Zerolo a la Alcaldía, dimite el lunes 27 de noviembre de 2006; lo sustituye Hilario Rodríguez, que “hereda” a Rafael Amargo como director en medio de una relación con el director andaluz que se convertiría en un calvario para el concejal nacionalista.

Este periódico desveló en su edición del 30 de noviembre que Amargo cobraría un millón de euros -953.285,92 euros- por la dirección artística, material audiovisual, sonido e iluminación de la gala de la reina.

Rafael Amargo fue un filón, y no solo por el dinero que se llevó por la dirección y producción artística, sino por el “juego” que dió en las entrevistas que concedió. En su presentación en sociedad como director, el bailarín dijo en EL DÍA: “En la Gala sólo actuará lo mejor de cada grupo”. Molesto porque había trascendido que iba a cobrar un millón de euros por la gala, pidió una oportunidad: “Déjenme que empiece!”. Y dio unas pinceladas: “La gala cambia totalmente el tono. Eso de salir cien mil personas por rellenar el escenario y justificarlo, no. Si tienen que salir tres y el escenario se queda vacío no pasa nada. No voy a meter gente por meter”.

La operación esta bajo secreto de sumario y el artista permanece en dependencias policiales

El bailarín que crecía según hablaba y se sucedían las entrevistas antes de la elección de la reina. De nuevo en EL DÍA, dijo: “Vamos a hacer un cásting y de cada murga y comparsa cogeremos dos o tres. En la gala estará lo mejor de cada casa. Estamos ante un espectáculo muy serio que está mi nombre detrás. Además de director de escena soy bailarín y coreógrafo y no puedo poner a bailar una persona que no sabe. Quiero hacer una cosa digna”. “Ya pasó una vez que salió Tony Santos y se fueron los bailarines a pedirle en el escenario un autógrafo al intérprete. No señor, esto es un espectáculo serio. Habrá que educar a la gente”.

El lunes 15 de enero de 2007, los grupos del Carnaval manifiestan su desacuerdo con los planteamientos de Amargo para la gala, tanto por el fondo como por la forma de sus declaraciones, y aseguran que “bajo esas condiciones, no participarán”.

Las agrupaciones de cuerpo de baile y parranda se reunieron el martes 16 de enero, después del sorteo que deparó el orden de los concurso, y acuerdan no participar en la gala, lo que respalda la decisión de Amargo de organizar su propio grupo de baile para, entre otras cosas, “cuidar la imagen”, dejando entrever que “las mujeres gruesas” no pueden participar. Al día siguiente, el alcalde Zerolo mantiene una reunión con Amargo para llamarlo a capítulo: “nunca quise hacer referencia a un proceso de selección por motivos estéticos”, dijo. Hilario Rodríguez, como concejal de Fiestas, capeó el temporal como pudo hasta que llegó la gala. Antes del espectáculo, Amargo alimenta la polémica. En el cásting que realizó para su ballet... el nivel era bajo.

Antes del 14 de febrero -día del del espectáculo-, al bailarín se le veía más en los platós de televisión que en los ensayos de la gala de la reina hasta el punto de afirmar en Tele 5 que “el protagonista (de la gala) soy yo”, atribuyéndose que se agotaran las entradas gracias a su poder de convocatoria.

Gala basura

El lunes 29 de septiembre, EL DÍA desvela la gala que prepara Amargo: “Edith Salazar, Bibi Andersen, Lucrecia, Belén Esteban -cantando un tema de Madonna, Soraya, Rosa y Gloria Gaynor son las estrellas de la gala de Amargo, más la murga ganadora y una artista internacional que supla la baja de Jennifer López (como se anunció) en la deliberación)”.

Y llegó la gala del día de los enamorados de 2007. La víspera, este periódico desvela el guión: Belén Esteban intervendría en el papel de Madonna atada a una cruz con el letrero “Santa Cruz”.

La noche del miércoles 14 de febrero fue proclamada reina Elizabeth García, con la fantasía “Miss Dior”, de Leo Martínez, en representación de EL DÍA. El título: “Gala basura”, en el que se daba cuenta de los desatinos del bailarín, hasta el punto que el ayuntamiento anunció su intención de denunciar al director de la gala por los daños y perjuicios ocasionados por el bochornoso espectáculo. Del millón, solo le retuvieron 200.000 euros del pago y una fianza de 38.000 euros, sin incluir la repercusión mediática que tuvo el Carnaval de Amargo, que trece años después permanece en la retina de muchos.