Un pesquero, el Arzak 2, de 21 metros de eslora y bandera mauritana, se fue a pique en la tarde de ayer a 131 millas marinas, unos 210 kilómetros, al sur de Gran Canaria. Los cinco tripulantes –dos portugueses, dos mauritanos y un angoleño- consiguieron ponerse a salvo en las balsas salvavidas y fueron rescatados en buen estado de salud por un helicóptero de Salvamento Marítimo.
El accidente se produjo sobre las 16:25 horas, cuando lel organismo de rescates en alta mar recibió un aviso de que el citado buque comenzaba a hundirse a la altura de la localidad saharaui de Dajla, antigua Villa Cisneros. La primera decisión fue movilizar al helicóptero Helimer 222, con base en el aeropuerto de Gran Canaria, que cargó combustible dada la distancia que tenía que recorrer, superior a los 400 kilómetros, para después dirigirse a las coordenadas facilitadas.
Al mismo tiempo, Salvamento Marítimo dio aviso al barco Rising Wind, un mercante panameño que cubría la ruta entre el puerto de Kamsar, en Guinea, y el de San Ciprián, en la provincia de Lugo, y que se encontraba a seis millas del pesquero. El buque recibió la orden de que debía acudir a la posición para dar auxilio a los cinco marineros, todos hombres, según indicaron fuentes de la institución. La tripulación del Rising Wind informó a su llegada de que el Arzak 2 estaba ya hundido y que los cinco ocupantes se encontraban en buen estado de salud.
El rescate tuvo lugar pocos minutos después de las seis de la tarde y el Helimer 222 se posó en el aeropuerto de Gran Canaria en torno a las 19.18 horas, donde desembarcó a los cinco tripulantes que, según las mismas fuentes, en principio no iban a ser atendidos por sanitarios al no sufrir herida alguna en el accidente.
Este barco ya fue protagonista en febrero del año pasado de un remolque cuando se encontraba en proceso de captura de pescado al sur de Maspalomas. En aquella ocasión, Salvamento Marítimo recibió una alerta en la que se indicaba que este pesquero congelador se había quedado sin máquina y a la deriva a 13 millas al sur del Faro de Maspalomas. “La tripulación del Miguel de Cervantes ha pasado toda la noche navegando tras hacer firme en la tarde de ayer el remolque del Arzak 2”, destacó aquel 24 de febrero de 2019 la institución en las redes sociales, donde resaltó además el duro trabajo de la tripulación para llevar a cabo la operación.
El pesquero mauritano fue trasladado entonces al Puerto de La Luz para proceder a solucionar las averías que provocaron que se quedara sin motor.
