La Policía Municipal de Madrid descubrió y desmanteló dos pisos en el madrileño distrito de Tetuán que funcionaban como local de copas y burdel clandestinos y donde había más de 70 personas sin mascarillas e incumpliendo todas las medidas de seguridad antiCovid, informó un portavoz del Cuerpo Local.

Los hechos tuvieron del sábado sobre las 3:45 horas. Dos agentes de paisano, en labores de seguridad ciudadana, pasaban por la zona cuando un hombre les animó a subir a dos pisos situados en la tercera planta del número 11 de la calle Marqués de Viana, al lado de un conocido local de alterne de la zona cerrado a esa hora por las medidas antipandemia.

El captador, que dijo que actuaba de relaciones públicas y también de vigilante para evitar a la Policía, comentó a los agentes camuflados que arriba podían encontrar "alcohol, chicas y fiestas".

Los funcionarios subieron y encontraron con dos puertas contiguas, una que daba aun piso que ejercía de bar, con muchísimas personas en mesas, taburetes y barras con listas de bebidas, a 20 euros la copa normal. El otro piso funcionaba con habitaciones donde supuestamente se ejercía la prostitución. Había unas 30 mujeres en total. Finalmente, los agentes se identificaron como tal y realizaron 75 denuncias, entre clientes y trabajadoras, por incumplimiento de salud pública, ya que ninguna persona llevaba puesta la mascarilla, ni se respetaban distancias entre mesas ni otras restricciones aprobadas por la Comunidad de Madrid, cuyo incumplimiento llevan acarreadas multas de 10.000 a 600.000 euros.

Asimismo, levantaron un acta contra los dueños de los pisos en virtud de la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas (LEPAR) porque estos pisos estaban ejerciendo de bar especial con música sin licencia ni requisitos de ningún tipo y con un excesivo aforo. La Policía investiga lo ocurrido por si además se pueden imputar a los responsables un grave delito contra la salud pública, entre otros.

E Desobediencia. El alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, considera que las imágenes de la detención este pasado lunes de una surfista en la Zurriola, que se había saltado el confinamiento tras dar positivo en Covid-19, y la situación que se produjo es "muestra de irresponsabilidad". No obstante, se ha mostrado convencido de que los donostiarras en su absoluta mayoría no se comportan así".

En una rueda de prensa se ha referido de este modo, a preguntas de los periodistas, a la detención de la citada mujer, al parecer socorrista de una de las playas donostiarras, por desobediencia grave a agentes de la autoridad, al negarse a dejar de practicar surf, desatendiendo los requerimientos de los agentes, que conocían que ésta se había saltado el confinamiento al haber dado positivo en Covid-19.

El regidor donostiarra ha apelado a la "responsabilidad" que, según ha dicho, es "lo que se echa en falta en esa situación".