La Policía Nacional ha detenido en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife a una mujer de 50 años y sin antecedentes como presunta autora de un delito de hurto. Según la información facilitada, la detenida aprovechaba que trabajaba como cuidadora de una anciana nonagenaria para robar joyas de su domicilio. La mujer sustrajo a la víctima piezas de joyería por valor de 800 euros.

Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Canarias, fue la hija de anciana la que denunció la sustracción de diferentes joyas en el domicilio de su madre, al percatarse de la ausencia de varias piezas.

Fue en ese momento cuando la Policía Nacional inició una investigación que se centró en la cuidadora de la mujer. Se tomó esta decisión ya que los familiares de la víctima mostraban recelos hacia ella y sospechaban que podía ser la autora de este robo. Debido a estas sospechas, la familia de la anciana nonagenaria ya había despedido a esta trabajadora cuando conoció el robo.

De esta manera, gracias al trabajo que llevaron a cabo efectivos de la Policía Nacional y según las diligencias practicadas permitieron relacionar a la extrabajadora de la familia con la venta de diferentes lotes de joyas en una casa de empeños de la capital tinerfeña.

Para poder llevar a cabo esta relación, la familia tuvo que reconocer las piezas que habían sido vendidas en esta casa de empeño. En concreto, las joyas pertenecientes a dos de estos lotes fueron reconocidas, a través de fotografías, por la denunciante como las sustraídas a su madre.

Por este motivo, los policías nacionales procedieron a la detención de la presunta autora del hecho, dando cuenta del mismo a la autoridad judicial competente a través del atestado realizado al efecto.