La Policía Nacional ha detenido en Valencia a dos jóvenes, de 23 y 21 años, ambos españoles, acusados de un delito de agresión sexual a una chica de 18 años con la que quedaron a través de una conocida red social. La víctima asegura que sus agresores la forzaron a mantener relaciones sexuales tras ofrecerle alcohol y cocaína en el piso de los padres de uno de ellos, situado en el barrio de Ayora de Valencia.

Los arrestados presuntamente se habrían aprovechado del estado en el que se encontraba su víctima, quien inicialmente habría accedido a tener sexo consentido, según las fuentes consultadas por este periódico. No obstante, en un momento dado, y al encontrarse mareada, la joven les dijo que no quería ir a más cuando éstos trataron de penetrarla analmente. Pese a su negativa y a que la víctima les insistió en que pararan, ambos la violaron, sin que ésta pudiera oponer demasiada resistencia debido a los efectos del alcohol y otras sustancias, según indicaron fuentes jurídicas.

Después de forzarla la metieron en la ducha, donde nuevamente uno de ellos la habría agredido sexualmente mientras el otro estaba en el comedor de la casa. Tras cometer la agresión sexual múltiple los presuntos autores llevaron a su víctima a un restaurante próximo, donde ésta había quedado con unos amigos, marchándose apresuradamente del lugar sin dar ningún tipo de explicación.

Los amigos de la joven, al ver su estado de nerviosismo y sus sollozos, extrañados también por la actitud de sus acompañantes, que la abandonaron a toda prisa, le preguntaron por lo ocurrido. Fue entonces cuando la víctima se derrumbó y les contó que la habían violado. Inmediatamente llamaron a la madre de la chica y a la policía. Al restaurante acudieron agentes de la Policía Nacional, quienes activaron el protocolo ante casos de agresión sexual nada más hablar con la joven.

Así, la víctima fue trasladada al Hospital Arnau de Vilanova, donde fue explorada por el médico forense de guardia. Según ha podido confirmar este periódico, la agredida presentaba lesiones compatibles con una agresión sexual, tanto vaginal como anal.

Los hechos, que investiga el Juzgado de Instrucción número cuatro de València, ocurrieron el pasado 24 de julio. Esa tarde la joven quedó a las 18.30 horas en las parada del metro de Ayora con dos chicos a los que había conocido a través de la red social Instagram. De forma voluntaria la chica, de 18 años, accedió a ir al piso de los padres del menor de ellos, de 21 años, quien insistió diciendo que no había nadie en su casa.

Una vez allí tanto el hijo de los propietarios del inmueble, como su amigo sevillano, que había venido a pasar unos días a Valencia, la convencieron para empezar a beber alcohol. Además, según denunció la víctima a la policía, los dos jóvenes le ofrecieron insistentemente para que consumiera cocaína.

Aunque la víctima reconoce que al principio accedió a tener sexo con ellos, cuando vio que se encontraba mal y que no quería seguir con sus juegos, les dijo claramente en varias ocasiones que pararan y que la dejaran marcharse. Aunque estaba aturdida por la mezcla del alcohol y la droga que le habrían suministrado, la agredida recuerda que les pidió que usaran preservativo, a lo que también se negaron sus agresores.

Gracias a los datos facilitados por la denunciante la Policía Nacional arrestó a sus dos presuntos agresores sexuales, quienes fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número siete de Valencia. Ambos detenidos se acogieron a su derecho a no declarar y no dieron ningún tipo de argumentación al juez sobre lo ocurrido. Por el momento han quedado en libertad acusados de agresión sexual y con una orden de alejamiento de 300 metros respecto de su víctima, así como con la obligación de acudir periódicamente a firmar al juzgado.