La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), dependiente del Ministerio de Sanidad, ha advertido de la comercialización de boquerones en vinagre procedentes de España con presencia de parásito vivo anisakis. El producto en concreto pertenece a la marca Pescados Medina, y se presenta en envases de plástico de 250 gramos. El lote afectado es el 270420, con fecha de caducidad del 27 de julio de este año.

La alerta fue trasladada por la comunidad autónoma de Andalucía, tras registrar una intoxicación alimentaria relacionada con el consumo de estos productos. El artículo afectado, fabricado en Andalucía, ha sido distribuido también a Aragón, Cataluña, Islas Canarias, Castilla y León y Madrid. Hasta el momento, se han detectado tres personas afectadas con sintomatología leve.

Sanidad ha recomendado a las personas que tengan en su domicilio el producto afectado por esta alerta se abstengan de consumirlo y lo devuelvan al punto de compra. Esta información ha sido trasladada por la Aesan a todas las comunidades autónomas a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (Sciri), para que continúe la retirada de los productos afectados de los canales de comercialización.

El anisakis simplex es un parásito de unos dos centímetros de largo, cuyas larvas viven en el aparato digestivo de muchas especies marinas, como la merluza, el bacalao, el atún, el pulpo, la sepia, el calamar y también en algunos crustáceos, como los cangrejos y las langostas.

Las especies de pescados descritos como huéspedes del anisakis simplex son el bacalao, sardina, boquerón, arenque, salmón, abadejo, merluza, pescadilla, fletán, rodaballo, caballa, bonito y jurel. Entre los cefalópodos más afectados figuran el calamar, el pulpo y la sepia. En los mariscos crustáceos también puede encontrase.

La vía de entrada de este parásito en nuestro cuerpo es la ingesta de pescado crudo, en salazón, marinado, ahumado o poco cocinado, según las explicaciones de algunos expertos en esta materia.