Miembros de la Policía Local de la villa de Candelaria detuvieron durante el mediodía del pasado Viernes Santo a un menor de 17 años de edad como presunto autor de un delito de desobediencia grave a la autoridad, puesto que, en el marco de la situación de alarma establecida por el Real Decreto 463/2020, ya había sido denunciado antes en siete ocasiones. Este tipo de conductas demuestran que, para algunos ciudadanos, las propuestas de sanción que les imponen los diferentes cuerpos de seguridad no les impiden mantener una conducta insolidaria y de riesgo ante la expansión del coronavirus Covid-19.

La intervención de los agentes municipales se desarrolló en las inmediaciones de la calle El Pozo. Los funcionarios realizaban tareas de vigilancia por el citado enclave y encontraron a dos adolescentes que se hallaban en la vía pública. Ante dicha circunstancia, los policías locales se aproximaron a los mismos para preguntarles qué hacían en el lugar e identificarlos. Desde el primer momento, quedó claro que ambos menores de edad no tenían motivo alguno para saltarse el confinamiento domiciliario. Y, además, estaban consumiendo hachís.

Al insertar su nombre y apellidos, junto a su dirección, en una base de datos, los integrantes del cuerpo de seguridad municipal comprobaron que al mismo menor le habían levantado actas en siete ocasiones anteriores.

Varias infracciones

Ante esa acumulación de infracciones y ante el manifiesto desprecio por la normativa establecida para intentar frenar la pandemia, los agentes municipales procedieron al arresto del mismo.

El individuo quedó a disposición de la Fiscalía de Menores de la provincia de Santa Cruz de Tenerife.

Desde el pasado 14 de marzo, cuando el Gobierno del Estado decretó el estado de alarma, los profesionales de la Policía Local de Candelaria han interpuesto alrededor de medio millar de denuncias por el incumplimiento del citado Real Decreto.