Guardias civiles de Icod de los Vinos sancionaron a los dueños de tres bares de dicho municipio por incumplir las medidas del real decreto de estado de alarma. En un local, que aparentemente estaba cerrado, los agentes hallaron a cuatro personas, los propietarios y dos clientes con bebidas alcohólicas abiertas en la barra.

En el segundo, la patrulla sorprendió a cinco personas: el dueño y cuatro clientes. La excusa del primero fue que sus amigos lo ayudaban a pintar el establecimiento, pero también bebían alcohol. En el tercer caso, los guardias hallaron a tres personas en un supermercado que comunicaba desde su interior con un bar que aparentemente estaba cerrado. Dos de las personas son los dueños de ambos negocios y el tercero, un cliente que dijo haber ido a comprar frutos secos. Pero los agentes pidieron que abrieran la puerta que une los dos locales y vieron que consumían alcohol.