Miembros de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife rescataron recientemente a un hombre de avanzada edad que permaneció una semana sin comer ni beber, tendido en el suelo de su vivienda, después de sufrir una caída y no poder moverse para solicitar auxilio a sus familiares o los servicios de emergencia. En estos casos, la vida en soledad conlleva estos riesgos.

La intervención de los agentes en dicho servicio humanitario se produjo el pasado sábado, en el Distrito de Ofra. Estos profesionales consiguieron salvar a un varón de 72 años que el pasado 14 de diciembre quedó tendido en el suelo de la cocina de su piso. Durante ese tiempo, la víctima estuvo inmóvil y fue localizado al límite de sus fuerzas, después de que estuviera siete días sin comer ni beber alimento alguno.

El actuación de estos policías comenzó a las 15:00 horas del pasado sábado cuando fueron avisados por una vecina para que acudieran a un domicilio situado en la avenida Príncipes de España. El motivo fue que varios ciudadanos detectaron un fuerte mal olor en su edificio que procedía de uno de los domicilios. Los residentes y los funcionarios localizaron el foco del hedor de una vivienda en la tercera planta.

Los agentes municipales tocaron a la puerta para saber si había alguien en el referido piso. Desde el otro lado de la puerta, una persona respondió con una voz muy débil. Pero en esas condiciones les explicó que no podía acercarse hasta la cerradura para que pudieran entrar, lo que hubiese permitido que lo auxiliaran con mayor rapidez.

Ante la gravedad de la situación registrada, los policías locales solicitaron la presencia de bomberos del Consorcio de Tenerife del parque de Tomé Cano, así como de una ambulancia de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario (SUC), con el objetivo de que los primeros abrieran la puerta y los segundos atendieran lo más rápido posible a la víctima.

Ambos recursos se desplazaron hasta el edificio de forma inmediata. Poco después, hasta la avenida Príncipes de España acudió una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, cuyos agentes colaboraron para identificar al hombre afectado.

Cuando consiguieron acceder al piso de los hechos, los recursos de seguridad y emergencias comprobaron que, junto al varón afectado, se hallaba una perra que había permanecido junto a su propietario de forma fiel.

Los agentes municipales hablaron con el dueño de la vivienda, que les contó que había sufrido una caída en la cocina el pasado día 14 de diciembre y que, desde ese momento, se hallaba tumbado, ya que no había sido capaz de levantarse para alimentarse o para solicitar auxilio a familiares, conocidos o vecinos. El personal sanitario de la ambulancia consiguió estabilizar a la víctima del accidente doméstico y lo trasladó hasta el área de Urgencias de un hospital.