Al menos 14 familias vietnamitas han denunciado la desaparición de familiares y sospechan que puedan estar entre los 39 migrantes hallados muertos el miércoles en un camión en Essex, en Inglaterra.

Nueve casos de desaparición han sido denunciados en la provincia de Ha Tinh y otros cinco casos en la de Nghe An, ambas en el centro del país, y han enviado fotografías para su posible identificación, informó este domingo el diario vietnamita Thanh Mien.

El primer ministro de Vietnam, Nguyen Xuan Phuc, ordenó en un comunicado este fin de semana una investigación sobre la posible presencia de vietnamitas entre las víctimas y se comprometió a actuar con severidad contra las redes de tráfico de personas.

Las provincias de Ha Tinh y Nghe An cuentan con un alto porcentaje de población rural y menor desarrollo que otras partes de Vietnam, por lo que muchos de sus jóvenes tratan de emigrar a Europa en busca de oportunidades.

Con 100 millones de habitantes y un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 7,08 % en 2018, Vietnam ha avanzado mucho en la erradicación de la pobreza, pero aún persisten problemas como las desnutrición infantil y la desigualdad, sobre todo en zonas rurales.

Según el informe Mapping vulnerabilities of victims of trafficking from Vietnam to Europe, los emigrantes vietnamitas pagan entre 10.000 y 40.000 dólares (entre 9.000 y 36.000 euros) a los traficantes de personas por el viaje a Europa.

Los 39 cadáveres, incluidos 31 hombres y 8 mujeres, fueron encontrados el 23 de octubre en el interior de un camión frigorífico conducido por un norirlandés de 25 años identificado como Mo Robinson, acusado de 39 cargos de homicidio y tráfico de personas.