Estabilizado. El incendio que desde el mediodía del pasado sábado tiñe de negro parte de la Cumbre de Gran Canaria ya no avanza. Los medios terrestre y aéreos han conseguido estabilizarlo tras afectar a unas 1.500 hectáreas en Tejeda, Artenara y los altos de Gáldar. El presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, mostró ayer su esperanza de que a lo largo de la mañana de hoy ya sea dado por controlado después de que el millar de vecinos que habían sido desalojado ya haya podido regresar a sus casas. Y mientras lo recursos aún trabajan en el terreno, el juez envió ayer a prisión provisional a José S. R., el autor confeso del incendio durante unos trabajos con una radiar en una finca privada de Las Arvejas, quien sin embargo eludió entrar en la cárcel con el pago de una fianza de 25.000 euros. Las buenas noticias no sólo llegaban desde la Cumbre. El fuego provocado de Cazadores, que se originó a última hora de lunes, también está estabilizado después de quemar 160 hectáreas de terreno y provocar la evacuación de barrios como La Pasadilla (Ingenio) o varias viviendas diseminadas en el barranco de Guayadeque (Agüimes). Las administraciones solicitaron ayer la colaboración ciudadana para tratar de identificar al autor. Y es que esta zona ha sufrido durante las tres últimas décadas la acción de las llamas con un mismo patrón: siempre ocurren en verano o a las puertas del estío, se producen de noche y en un punto cercano a Hoya de la Perra.

La noche del lunes al martes, que se preveía aún complicada aunque no tanto como las dos anteriores en las que se regeneraron numerosos focos, discurrió sin grandes sobresaltos. Las unidades que atacan el fuego desde tierra consiguieron apagar los rescoldos que se reavivaron gracias a los vientos, que llegaron a soplar en rachas de hasta 61 kilómetros por hora en el pueblo de Tejeda. Este era uno de los temores de los equipos de extinción. Más, cuando a última hora del lunes se iniciaba un nuevo incendio en Cazadores, lo que obligó a parte de los aproximadamente 230 efectivos que se encontraban en los municipios cumbreros a desplazarse hasta el este de la Isla. Así, el día amaneció con el mismo panorama que la jornada anterior: el perímetro de la zona afectada en la Cumbre abarcaba unos 23 kilómetros, que significaba que no había aumentado durante la noche.

Aun así, continuaron los trabajos para seguir enfriando todo el área afectada mediante la participación de 13 medios aéreos, entre ellos dos hidroaviones -uno del Ministerio de Medio Ambiente y el otro del Ministerio de Defensa-, una avioneta Air Tractor 802F procedente de La Gomera y una decena de helicópteros; y las aproximadamente 600 personas que actúan desde tierra en varios turnos. Parte de estos recursos se trasladó en algunos momentos del día a Cazadores, donde el voraz incendio que se había propagado muy rápido la noche anterior perdía fuerza con el paso de las horas gracias, en parte, a la utilización de la técnica de quemas de ensanche, consistente en crear una línea de fuegos controlados para que el frente del incendio se topara ya con zonas carbonizadas y evitar así que continuara su camino hacia Guayadeque. Este fuego obligó a desalojar a unas 200 personas entre los pagos de Cazadores, La Pasadilla y viviendas diseminadas del citado barranco, que a lo largo de la mañana pudieron regresar a sus viviendas que no quedaron afectadas.

También los vecinos de Tejeda pudieron volver a primera hora de la mañana a sus casas después de que algunos de ellos -quienes residen en los barrios de Peña Rajada, El Rincón, Las Crucitas y El Majuelo- llevaran tres noches durmiendo fuera. Los tejedenses comprobaron que prácticamente todos los edificios habían quedado intactos tras el paso de las llamas. Sólo dos inmuebles en el barrio de El Majuelo resultaron dañados por el incendio, entre los que había uno que estaba siendo remodelado y quedó destruido por completo.

Pese a las buenas noticias con el regreso de los afectados y a que los incendios ya están estabilizados, el Centro de Coordinación de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 informó anoche de que continúa el nivel 2 al estar amenazados núcleos de población y por la presencia de medios del Estado, por lo que el Gobierno de Canarias sigue dirigiendo la emergencia, según el Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales de Canarias (Infoca). El 112 señaló en un comunicado que todos los medios de extinción presentes hasta ahora seguirán activados para realizar labores de vigilancia de los puntos calientes y actuar lo más rápido posible ante posibles reactivaciones.

En este sentido, continúan trabajando desde tierra unos 600 efectivos del Cabildo de Gran Canaria, Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (Brif) de La Palma, Equipos de Intervención y Refuerzo contra Incendios Forestales (Eirif) de La Palma, La Gomera y El Hierro, Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, Unidad Militar de Emergencias (UME), Servicio de Urgencias Canario (SUC), Cruz Roja, Protección Civil de Ingenio, San Bartolomé de Tirajana, Santa Brígida, Santa Lucía, Teror, Valleseco, San Mateo, Valsequillo, Moya, Mogán y Las Palmas de Gran Canaria; Policía Local de Tejeda, Gáldar y Artenara; Policía Canaria, Guardia Civil y Emergencias Fuerteventura.

Otra de las medidas tomadas ayer por el Ejecutivo regional es la prohibición de las actividades recreativas, lúdicas, festivas, turísticas y deportivas, "sobre todo aquellas que supongan una concentración importante de personas", se subraya en la nota. Entre los festejos afectados se encuentran los de La Cuevita en Artenara, que se iban a celebrar mañana y que el Ayuntamiento decidió ayer suspenderlos. Además, el Gobierno recomienda a los ciudadanos que no transiten por el perímetro afectado ni a pie ni con vehículos, "reduciéndolo a lo estrictamente necesario". Y agregó que sólo la carretera GC-150 se encuentra cortada entre Cruz de Tejeda y los Pinos de Gáldar.

Y todo esto ocurre con un episodio de temperaturas altas que está a la vuelta de la esquina. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) prevé un progresivo aumento del calor con la llegada de vientos moderados con intervalos fuertes procedente del este - nordeste, que podrían venir acompañados de calima. Esto hará que suban los termómetros, que podrían marcar máximas de hasta 31 grados en Tejeda, con posibilidades de que suban hasta los 36, 37 y 35 grados el viernes, sábado y domingo, respectivamente, con mínimas que se situarán entre los 23 y los 28. Ya de cara a la próxima semana y a cinco días vista, se esperan incluso lluvias en el municipio cumbrero. Meteorología da un 65% probabilidades de que se produzcan precipitaciones, que traerán consigo también una bajada de temperaturas que oscilarán entre los 29 y los 19 grados.