La Policía Nacional ha detenido a una mujer de 37 años como presunta autora de un delito de estafa cometido mediante la utilización fraudulenta de una tarjeta de crédito vinculada a las cuentas de tres clientes de la entidad bancaria para la que trabajaba, a los que llegó a estafar 285.000 euros.

La investigación de la Policía Nacional se inició tras la denuncia formulada por el representante legal de un hombre de 93 años. En ella ponía en conocimiento un fraude económico importante: alguien, a lo largo de más de un año, había dispuesto de más de 65.000 euros del anciano sin el permiso de este.

Los agentes constataron que los movimientos bancarios denunciados respondían a operaciones realizadas con tarjeta de crédito. Este extremo contrastaba con el hecho de que el denunciante, en ningún momento, hubiera tenido conocimiento de la existencia de la misma.

La línea de investigación de los policías nacionales apuntaba a una empleada de la entidad bancaria que podría haber gestionado y usado ilícitamente la tarjeta vinculada a la cuenta del denunciante. A esta mujer se la pudo conectar con el uso de la tarjeta de crédito en la compra de complementos de moda en un centro comercial de la capital tinerfeña.

La colaboración ofrecida por la entidad bancaria para la que trabajaba esta mujer permitió a los policías nacionales acreditar que los trámites bancarios de la tarjeta habían sido realizados por ella y que, además del denunciante, existían otras dos posibles víctimas, dado que la citada tarjeta había sido vinculada a otras dos cuentas. Asimismo, el fraude económico producido durante más de un año fue cuantificado en 285.000 euros.

Los agentes procedieron a la detención de esta mujer que, junto al atestado instruido por la Policía Nacional al efecto, fue puesta a disposición de la autoridad judicial competente. Las actuaciones han sido realizadas por policías nacionales del Grupo de Investigación de la Comisaría de Distrito Sur de Santa Cruz de Tenerife.