Un vecino de Las Palmas de Gran Canaria que padecía un importante grado de dependencia falleció tras morir en su casa el hermano que lo cuidaba, sin que nadie se diera cuenta ni los echara en falta durante días.

Los cuerpos de los dos hermanos, de 74 y 70 años, fueron hallados el pasado 21 de junio después de que los vecinos avisaran del fuerte olor que salía de su vivienda, en la calle Angostura, en La Isleta.

Ninguno de dichos varones presentaba señales de violencia.