Miembros de la Policía Local de Santa Cruz de Tenerife detuvieron ayer a dos hombres, de 46 y 24 años, como presuntos autores de un delito de lesiones y otro de daños materiales, ya que supuestamente utilizaron una barra de hierro para golpear a un vecino en varias partes del cuerpo y después lo tiraron a un barranco en la zona de Valle Crispín. Además, utilizaron el objeto contundente para causar destrozos en el vehículo del afectado. El origen de la agresión está en las malas relaciones que existen entre las personas implicadas, que son vecinos en dicho paraje del Distrito de Anaga.
Cabe recordar que, según las fuentes consultadas, el pasado miércoles, en Valle Crispín, se produjo un conato de incendio y en aquel momento un familiar de los ahora agresores denunció al varón que fue agredido ayer como supuesto autor del fuego. Y, de hecho, figura como tal ante el cuerpo de seguridad municipal por provocar las llamas. A mediodía de ayer, los tres hombres se encontraron y mantuvieron un enfrentamiento verbal que acabó de forma violenta. Los ciudadanos de 46 y 24 años usaron el mencionado objeto contundente para propinarle lesiones de consideración. Y, después, lo lanzaron al barranco cercano. La barra de hierro también fue utilizada por los dos arrestados para romper el cristal de la puerta del conductor del turismo del afectado, así como para provocar otras abolladuras en la carrocería. Dicho efecto fue recuperado por los funcionarios policiales, según trascendió. Un agente de la Unidad del Medio y Entorno Natural (UMEN) de Santa Cruz de Tenerife fue el primero que alertó del suceso a los agentes municipales. La sala operativa del 1-1-2 activó a una ambulancia básica, cuyo personal atendió al herido, que sufrió lesiones de carácter moderado. Dicho recurso sanitario procedió al traslado de la víctima hasta el área de Urgencias del Hospital Universitario de La Candelaria.
