El hombre acusado de haber matado a otro a puñaladas en agosto de 2017 en Finca La Zanja, en la zona de Geneto, en el municipio de La Laguna, reconoció ayer que fue el autor del homicidio. Así comenzó ayer el juicio con Tribunal de Jurado que se desarrolla en la Sección VI de la Audiencia Provincial durante esta semana.

El acusado, identificado como G.J.G., aseguró que no se acuerda por qué empezó a discutir con la víctima. Entre otras cosas, explicó que había consumido bebidas alcohólicas.

No obstante, confirmó que primero atacó a otra persona con un machete, aunque fue interceptado por familiares que se hallaban en el lugar de los hechos. Y dijo que sí sabía que le había clavado un cuchillo al otro varón, en un arrebato de ira.

Los hechos ocurrieron el 3 de agosto de 2017 en un espacio comprendido entre Los Baldíos y San Miguel de Geneto. El ahora procesado, al que le constan antecedentes penales, estaba en la zona de Finca La Zanja. En dicho enclave se presentó otro hombre, con el que G.J.G. comenzó una acalorada discusión a las 22:45 horas aproximadamente. El enfrentamiento verbal fue la antesala de una violenta pelea, durante la que el acusado de homicidio trató de atacar a la víctima con un machete.

Sin embargo, sus hermanos intervinieron y, después de un forcejeo, lograron quitarle la mencionada arma blanca.

Pero cuando parecía que ya se había calmado un poco, el agresor se dirigió a la cocina de la vivienda y se hizo con un cuchillo de unos 24 centímetros de hoja. Según consta en el escrito elaborado por la Fiscalía, de nuevo regresó al lugar en el que se hallaba la otra persona y, con la clara intención de acabar con su vida, empezó a gritar que lo iba a matar. Y después le asestó varias puñaladas, una de ellas con orificio de entrada y salida en el brazo izquierdo.

El resto de cuchilladas tuvieron orificios de entrada en el costado izquierdo, entre la octava y la novena costilla, "causándole un hemotórax que le produjo la muerte a causa de un shock hemorrágico hipovolémico", según recoge el informe del Ministerio Público en base a la autopsia.

Después, el ahora procesado abandonó el lugar del homicidio y se dio a la fuga. Se escondió en la vivienda de un amigo, donde fue detenido por agentes de la Policía Nacional.

En el escrito del fiscal se establece que el consumo de bebidas alcohólicas en los momentos previos al ataque no fue suficiente como para que el procesado tuviera afectadas su capacidad de conocimiento o la de voluntad. Es decir, que era consciente de las consecuencias de sus actos durante la agresión.