Agentes españoles e italianos han detenido en Italia a un presunto anarquista español que estaba huido de la Justicia desde 2017 y al que se imputan varios atentados en aquel país, como la colocación de dos artefactos en la sede de la Liga Norte en Treviso en 2018.

Según ha informado este jueves la Dirección General de la Policía Nacional, agentes de este cuerpo han colaborado con las autoridades italianas en la investigación que ha llevado a la detención de J.A.S.F., español de 42 años, al que se imputa un delito de "favoreggimiento" terrorista de acuerdo al Código Penal italiano.

En la operación también han sido arrestadas otras dos personas de origen italiano relacionadas con el movimiento anárquico trentino y que hacían posible que el detenido español se mantuviese oculto en una zona boscosa al norte del país.

Según ha relatado la Policía Nacional, la detención se produjo el pasado miércoles en una zona boscosa en Marmentino (Brescia) después de que J.A.S.F. mantuviese una cita operativa con otro de los arrestados en esta operación.

El segundo detenido de origen italiano, M.O., está considerado miembro del movimiento anárquico trentino, mientras que la tercera arrestada es una mujer, M.G., que supuestamente prestó apoyo logístico a los otros dos detenidos.

En el momento de su arresto el anarquista español llevaba una mochila con material informático, mas de 1.000 euros en efectivo, un cuchillo de monte y una carta de identidad italiana falsa, todo ello para facilitar su actividad clandestina y su huida en caso de ser detectado por las fuerzas de seguridad.

Los agentes hallaron en uno de los dos registros domiciliarios elementos para hacer un artefacto explosivo.

Comprobaron además que durante los dos años en los que el anarquista español se ha mantenido en la clandestinidad ha participado presuntamente en varias acciones terroristas en Italia, como la colocación, el pasado mes de agosto, de dos explosivos en la sede del partido político Liga Norte.

Ambos estaban preparados para accionarse cuando los artificieros encargados de su desactivación llegaran a la zona, y uno de ellos era un artefacto trampa que no llegó a explosionar.

Los agentes calificaron el poder lesivo de los explosivos como de gran alcance y capaz de causar graves heridas a las personas allí presentes, ha precisado la Policía.

Este atentado fue reivindicado por el grupo terrorista anarquista FAI-FRI (Federación anarquista Informa/Frente Revolucionario Internacional) y durante la investigación los agentes de la Polizia di Stato confirmaron que el ADN del detenido se correspondía con el hallado en una carta que fue enviada a un diario italiano reivindicando el atentado.