La menor de 20 meses que murió el pasado mes de noviembre tras acudir al Hospital de Vinaròs (Castellón) con un cuadro de vómitos recibió una dosis "letal" de glucosa por "error" y "negligencia" de la enfermera que se la suministró, según ha manifestado a EFE el abogado de la familia de la niña.

El letrado ha citado el contenido del informe de la comisión de investigación creada por la Conselleria de Sanidad de la Generalitat Valenciana sobre este suceso, en el que se constata de manera "incontestable" esta "negligencia", según el abogado Rubén Darío Delgado, que denunció ante el juzgado la atención recibida por la menor.

La Conselleria de Sanidad ha declinado comentar el contenido del informe porque, según han manifestado a EFE fuentes de este departamento, se encuentra bajo investigación judicial.

Según el citado abogado, el informe confirma que la menor fue atendida por un médico de urgencias y no por un especialista en pediatría.

Cuando la menor empeoró, fue atendida por otro médico de urgencias, y no fue hasta que comenzaron las convulsiones, cuando un médico pediatra se ocupó de la niña, aunque ya no se pudo evitar su fallecimiento, siempre según el relato del abogado, que ha asegurado que estos detalles quedan recogidos en el informe.

La causa de la muerte, según constata el informe, fue la administración de una dosis "letal", excesivamente alta, de glucosa, después de que la enfermera administrara por vía intravenosa una cantidad que no se correspondía con la que indicó el facultativo médico por escrito, y además, la dosis que esta enfermera apuntó tampoco era la que indicó el doctor.

Evitar el sufrimiento de la familia

Según Delgado Ortiz, la enfermera "no solo administró mal la dosis, sino que también apuntó mal la orden del médico".

El abogado ha recordado que en la causa que instruye el Juzgado de Instrucción Nº 4 de Vinaròs figuran como investigados por un presunto delito de homicidio por imprudencia profesional grave dos enfermeras y cuatro médicos.

El letrado ha querido trasladar el agradecimiento al juez instructor del proceso por la "dedicación" a este asunto para que se resuelva con la "máxima rapidez" posible y evitar el sufrimiento tanto de la familia de la menor como de las personas que figuran como investigadas.

Actualmente se está finalizando la instrucción de este caso a falta de la práctica de una prueba propuesta por la defensa y de una declaración, por lo que la fecha para la celebración del juicio oral podría ser fijada en breve.