El acusado del horrendo crimen machista de Adeje, Thomas Handrick, únicamente tomó la palabra a lo largo de su comparecencia ante la autoridad judicial para insistir en que tenía que tomar la medicación que guardaba en su casa, según la información ofrecida en la jornada de ayer por parte del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC).

Ante dicha demanda, la magistrada acordó un registro domiciliario de manera inmediata para determinar a qué fármacos aludía Handrick y si contaba con prescripción médica.

La mencionada inspección del domicilio situado en la calle Ramón y Cajal, en el casco urbano de Adeje, se llevó a cabo en la tarde de ayer, después de que la jueza ordenara su ingreso en el centro penitenciario Tenerife II.

El acusado, guardias civiles de paisano y otros agentes uniformados estuvieron en la vivienda casi una hora.

Y de la casa extrajeron una bolsa de grandes dimensiones, cuyo contenido no ha trascendido hasta ahora.

Pasadas las 21:00 horas, el ciudadano alemán ingresó en la cárcel situada en el municipio de El Rosario, en uno de cuyos módulos permanecerá hasta que se celebre el juicio.