La crisis del alquiler, la Generación del 27 y Gabriel García Márquez centran la nueva PAU en Canarias

Vivir no debería ser tan complicado es el título del texto que han tenido que comentar los casi 11.000 alumnos que este miércoles 4 de junio se enfrentaron al primero de los exámenes de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) en Canarias, que volvió a ser el de Lengua y Literatura II. Por primera vez, los estudiantes han tenido tan solo una opción de examen en este año de transición en el que la prueba va evolucionando hacia un nuevo modelo que se podrá descubrir en los próximos cursos. En este primer día se han examinado los alumnos de Humanidades, Ciencias Sociales y Arte.

Esta carta a la directora de El País publicada en enero de este año formó parte de este examen en el que también estuvo presente la Generación del 27 y un fragmento del libro de Gabriel García Márquez, Crónica de una muerte anunciada. Gestos de asentimiento y muestras de alegría se repitieron en las diferentes aulas del Campus de Guajara de la Universidad de La Laguna (ULL) a las 09:30 horas, cuando el profesorado repartió este primer examen de la convocatoria ordinaria y los jóvenes pudieron comenzar a escribir.

Más fácil

Muchos de los alumnos canarios coincidieron en que esta primera prueba les había resultado fácil y celebraron los cambios introducidos en el examen, que transita hacia un modelo mucho más competencial y con el que los docentes tratan de fomentar el pensamiento crítico de los jóvenes, y no tanto el estudio de memoria.

Héctor Bravo fue uno de los primeros que entregó el examen en la mañana de este miércoles y celebró que él y sus compañeros habían preparado bien esta prueba en clase a lo largo del curso. Aunque las preguntas relacionadas con la modalidad textual y la Generación del 27 eran dos de los aspectos que más le preocupaban, salió contento de esta primera cita.

Minutos antes de que diera comienzo el examen, la vicerrectora de Estudiantes de la ULL, Rosario Hernández, coincidía con los alumnos en que este nuevo modelo de examen resultaría más sencillo para los alumnos.

Números

En Canarias, se examinan estos días 10.836 alumnos y, de ellos, 5.467 lo hacen en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Se enfrentan hasta el sábado 7 de junio a esta prueba que reestrena denominación, después de que en los últimos años se conociera bajo las siglas de EBAU. Homogeneizar la pruebas en todas las comunidades autónomas es uno de los objetivos de esta modificación en la que se trata de reducir la cantidad de temario que el alumnado tiene que memorizar. "Creo que se trata de un modelo más justo", resumió la vicerrectora lagunera, quien confió plenamente en que el estudiantado "está preparado para realizar estos exámenes porque llevan desde comienzos de curso practicando".

La vicerrectora dio la bienvenida a algunos alumnos y recordó que uno de los objetivos de la institución académica es que la mayor parte de los jóvenes que estos días se someten a las pruebas terminen cursando sus estudios en la propia Universidad de La Laguna, que en septiembre dará comienzo al nuevo curso académico, que en esta ocasión arrancará más pronto de lo habitual, el día 9.

Nueva prueba

Las novedades este año tienen que ver con una menor optatividad en las pruebas, a lo que se suma una pregunta de tipo competencial que busca que los aspirantes elaboren un texto desarrollando un pensamiento crítico, valorando la cohesión y en la que adquiere importancia la forma de expresarse. En este sentido, las faltas ortográficas ganan protagonismo ya que cada una restará 0,5 puntos hasta un total de tres. No obstante, las universidades canarias ya habían incluido este aspecto el año pasado, con una posible disminución de hasta cinco puntos.

Primera jornada de la PAU 2025 en Tenerife

Ver galería

El viceconsejero de Educación del Gobierno de Canarias José Manuel Cabrera, avanzó que "esperamos que los resultados sean satisfactorios" y recordó que Canarias ha estado presente en la organización de estas pruebas a nivel estatal. "Se está realizando un trabajo enorme y esperamos que el nuevo modelo se consolide en los próximos años porque lo que buscamos en que los alumnos sepan aplicar estos conocimientos en la vida real, y por eso queremos seguir trabajando en esta línea", avanzó y expresó que el objetivo del Ejecutivo autonómico es poder dar a conocer las sucesivas modificaciones desde comienzo de curso "para poder trabajar con calma con el alumnado".

En este sentido, muchos alumnos reconocieron tras el primero de los exámenes que la preparación en clase había sido importante para llegar sin demasiados nervios a la PAU. "En clase practicamos mucho con viñetas, así que el examen final me ha parecido más fácil", expresó Héctor Bravo. Por su parte, Jonás García también consideró que la prueba había sido sencilla y, aunque llegó nervioso desde Santa Úrsula a primera hora de la mañana, respiró tranquilo al terminar este prime control.

Cuatro días

Canarias se ha convertido en una de las dos únicas comunidades autónomas en las que las pruebas de acceso a la universidad se desarrollan durante cuatro días. Se trata de una medida que se tomó durante la pandemia, para separar al máximo al alumnado y reducir las ratios de las aulas. Sin embargo, el Archipiélago ha mantenido esta organización en la época postcovid.

Los vicerrectores de Estudiantes de las dos universidades públicas canarias destacaron en el arranque de las pruebas el reto logístico que supone organizar estas pruebas, con la convocatoria de todos los tribunales que trae aparejadas, en las diferentes islas.

Por islas, en Tenerife realizan la fase general con estos primeros exámenes 4.269 personas; en La Palma, 366; en La Gomera, 72; y en El Hierro, 41. En Las Palmas, se presentan a la PAU cerca de 5.400 estudiantes, de los cuales 708 lo hacen en Lanzarote y otros 504 en la de Fuerteventura. Debido a la insularidad, las dos universidades cuentan con sedes en cada una de las islas, excepto La Graciosa, lo que conlleva transporte y más logística.

"Debemos tener el margen para podernos desplazar, desplazar al tribunal y los exámenes", recordó el vicerrector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, David Sánchez. "Poder dividir al alumnado según su rama de Bachillerato nos ayuda mucho a organizar las aulas porque, además, cada año tenemos que dar respuesta a una mayor cantidad de alumnado con Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE)", expresó Rosario Hernández, quien precisó que este año, en la ULL, se recibe a unos 200 estudiantes de este grupo.

Suscríbete para seguir leyendo