Discapacidad
Judit Padrón: «Ahora salgo a vivir todos los días»
Judit Padrón, la mejor vendedora de la ONCE de la provincia de Santa Cruz de Tenerife en el año 2024, narra cómo su vida cambió por completo al diagnosticarle un grado de discapacidad del 66%, justo dos años después del nacimiento de su hijo

Judit Padrón recibiendo el premio de la ONCE a mejor vendedora del año 2024 de la provincia de Santa Cruz de Tenerife. / E. D.
La Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) te puede cambiar la vida. Y no por los millones de euros que suele repartir, sino por las nuevas oportunidades que brinda cada día a personas con discapacidad. O al menos así lo siente la herreña Judit Padrón, que fue diagnosticada con un grado de discapacidad del 66% en 2002 y la vida le cambió por completo: «Gracias a la entidad ahora salgo a vivir todos los días».
A Padrón le detectaron una malformación en la cabeza, de la que surge la discapacidad, justo dos años después de haber tenido a su hijo. «Fue un golpe muy duro de asimilar», cuenta. Así, con un niño pequeño y una profunda tristeza, Padrón se vio obligada a pasar por quirófano en una operación de la que «no sabía si iba a poder salir». En dicha intervención, los médicos tuvieron que radiar todo un lado del cuerpo que, debido a la exposición, acabó bastante dañado. El tratamiento le provocó una pérdida de visión parcial, reducción en la sensibilidad de un brazo, daños en la mandíbula y oído y muchos dolores de huesos.
A día de hoy, las citas médicas siguen formando parte de su día a día. Una situación a la que hay que sumar la incertidumbre de no saber de dónde viene dicha enfermedad. Y es que los neurólogos no han podido detectar aún si la malformación es de nacimiento o de otros motivos que se desconocen.
Antes de que su vida cambiara por completo, Padrón era conductora de guaguas y llevaba cerca de siete años trabajando en la empresa. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que compaginar el cuidado de su enfermedad con la actividad laboral no era posible. El mundo «se le cayó encima» cuando la despidieron, precisamente, por acudir a citas médicas. «Pensé que todo se acababa», rememora.
El apoyo de amigos y familiares ha sido clave para afrontar la patología
Asimilar su enfermedad fue lo más duro. «De repente te ves sin trabajo, con una enfermedad que no sabes cómo va a acabar y obligada a convertirse en otra persona », confiesa. El apoyo de su familia y amigos fue fundamental, pero en aquel entonces Padrón también empezó a acudir a terapia para comprender su diagnóstico.
Pese a su alto grado de discapacidad, los tribunales decidieron que no era suficiente para otorgarle la incapacidad absoluta: «Solo podían darme una parte porque podría realizar otro trabajo».
En 2017 llegó su segunda oportunidad gracias a su marido. Su pareja fue quien, tras hablar con un compañero del trabajo, le comentó la idea de unirse a la ONCE. En ese entonces Padrón estudiaba el ciclo superior de Enfermería, pero la idea de trabajar a diario con personas le llamó la atención y decidió presentar los papeles en la Organización. Para su sorpresa, la llamaron y comenzó su trayectoria hasta el día de hoy.
Desde entonces se ha convertido en una pieza fundamental para la organización sin ánimo de lucro. Tal es así que, Padrón recibió hace poco el galardón a mejor vendedora de la ONCE de la provincia de Santa Cruz de Tenerife en 2024. Un premio que le sirve como motivación, más que nunca, para salir a la calle todos los días. Durante la ceremonia de premios se quedó «fría», no se lo esperaba. Había siete nominados y de entre todos ella fue la elegida. «Para mí, que estoy en El Hierro, en la Isla más pequeña y en el punto de venta más pequeño, salir elegida fue una gran sorpresa», comenta con entusiasmo.
35 kilómetros al día
Padrón recorre todas las mañanas 35 kilómetros para incorporarse a su puesto de trabajo. Su rutina comienza en el Hospital de Valverde, donde, con una sonrisa, reparte ilusión a los pacientes y sus familiares desde las siete de la mañana. Tras unas horas ahí, Padrón se pone en marcha para recorrer los pueblos de la Isla. «Comienzo por el Norte y paso por Isora, San Andrés, El Pinar y termino mi ruta en La Restinga».
Entre risas, da gracias a que, pese a su discapacidad, aún pueda conducir porque sería «un auténtico caos» tener que coger guaguas. «Hago paradas en tiendas, bares e incluso casas de algunos particulares que me compran números de manera habitual», concreta. Padrón regresa a su casa en torno a las dos y media para almorzar, y coger fuerzas para retomar su actividad a las cuatro de la tarde, en una jornada que finalizará a las siete y media de la noche.
Lo que más disfruta Judit de su trabajo es el poder compartir historias y pequeños momentos con personas de su entorno. «Siempre hay alguien por la mañana que te cuenta sus problemas médicos o preocupaciones», expone Padrón, que agrega que es una de las grandes ventajas de estar al pie de calle. De hecho, la mujer agradece la amabilidad de la gente, ya que son muchos los que le ayudan a colocar el material o le traen un café.
Combatir la soledad
Pero si hay algo que motiva a Padrón a trabajar es poder combatir la soledad no deseada. No en vano, casi todo su público es mayor. «Al hacer mi ronda habitual suelo pasar por casa de algunos particulares y los veo solos. Creo que mi presencia es una buena manera de que se sientan acompañados aunque sea por un ratito al día», aclara.
La otra cara de la moneda
Pero no todo es de color rosa en este trabajo, las condiciones meteorológicas a veces le juegan una mala pasada. En los días de lluvia, viento o calor extremo, su discapacidad supone una dificultad más: «tienes que ser fuerte porque tienes que luchar contra tu enfermedad y a la vez con este puesto de trabajo que a veces es un poco duro».
Y es que la ONCE está repleta de personas fuertes. «Los compañeros que tengo son quienes me han dado la vida y me han permitido que vuelva a disfrutar de cada día», admite Padrón. Por esta razón, agradece a la organización la oportunidad que le han brindado: «Si no fuese por ellos no hubiese podido salir adelante y darle a mi hijo todo lo que necesitaba, una carrera y una madre feliz».
Suscríbete para seguir leyendo
- Guardia Civil alerta: 800 euros de multa por comprar en Aliexpress este artículo
- Espeluznante accidente en la TF-5 por la conducción imprudente en forma de zigzag de un conductor
- Encuentran el cuerpo de un hombre sin vida en un barranco en Tenerife
- La Palma atraviesa su periodo con mayor actividad volcánica en 4.000 años
- La primera iglesia ortodoxa canaria, la Sagrada Familia tinerfeña: sin concluir una obra que comenzó hace seis años
- Malestar en el casco de La Laguna con varias procesiones ‘rotas’ durante la Semana Santa
- Un gran espacio de ocio y viviendas accesibles: Santa Cruz licita por 6 millones las obras que transformarán La Salud Alto
- Una vivienda arde en llamas durante la noche en Tenerife