DGT: este es el motivo por el que nunca debes cerrar los retrovisores de tu coche

Descubre por qué la Dirección General de Tráfico desaconseja cerrar los retrovisores del coche

Este es el motivo por el que no debes cerrar los retrovisores del coche.

Este es el motivo por el que no debes cerrar los retrovisores del coche.

En nuestra rutina diaria como conductores, adoptamos ciertos hábitos que, aunque pueden parecer convenientes, no siempre son los más seguros. Uno de ellos, extendido entre muchos conductores, es el de cerrar los retrovisores laterales del coche al aparcar. ¿El motivo? Proteger los retrovisores de posibles golpes o roces, pero esta práctica, según la Dirección General de Tráfico (DGT), puede tener consecuencias negativas para la seguridad vial.

Los riesgos de cerrar los retrovisores

Si bien la intención de proteger nuestro vehículo es comprensible, la DGT argumenta que cerrar los retrovisores al aparcar puede generar varios problemas:

  • Percepción distorsionada de las distancias. Los retrovisores abiertos ayudan a otros conductores a calcular correctamente la distancia lateral al adelantar o al cambiar de carril. Al cerrarlos, se reduce visualmente el ancho del vehículo, lo que puede llevar a otros conductores a calcular mal las distancias y provocar roces o golpes.
  • Olvidarte de abrirlos antes de iniciar la marcha. La rutina y las prisas pueden hacer que olvidemos volver a desplegar los retrovisores antes de ponernos en marcha. Conducir con los retrovisores plegados reduce la visibilidad y puede generar situaciones de peligro.
  • Seguridad para los demás. Los retrovisores abiertos actúan como una referencia para que otros conductores mantengan una distancia lateral prudente al realizar maniobras, especialmente en calles estrechas. Al plegarlos, esta referencia desaparece, aumentando el riesgo de colisiones.

Alternativas más seguras para estacionar

En lugar de cerrar los retrovisores, la DGT aconseja adoptar prácticas de estacionamiento más seguras:

  • Buscar calles anchas. Si es posible, opta por aparcar en calles con mayor anchura, donde el riesgo de rozar los retrovisores con otros vehículos sea menor.
  • Estacionar en zonas habilitadas. Prioriza las plazas de aparcamiento designadas, que suelen ofrecer más espacio y seguridad para los vehículos.
  • Confiar en los sistemas de seguridad del coche. Los coches modernos suelen estar equipados con sensores de aparcamiento y cámaras que ayudan a maniobrar con mayor seguridad.

Los retrovisores son un elemento fundamental para la seguridad vial. Su función principal es proporcionar visibilidad de todo lo que rodea al vehículo, facilitando maniobras como cambios de carril, adelantamientos y estacionamientos. Los retrovisores también actúan como una referencia visual para otros conductores, ayudándoles a calcular las distancias laterales de manera segura. Por lo tanto, dejarlos desplegados es una medida de seguridad tanto para nuestro vehículo como para los demás.

Tracking Pixel Contents