Entrevista

Ana Isabel Tomás Tudela: "Es catastrófico, no existe un lugar seguro en toda la Franja de Gaza"

La coordinadora de Recursos Humanos y Finanzas en Gaza de Médicos Sin Fronteras cuenta que "la gente se organiza para transportar a los heridos"

Ana Tomás. /

Ana Tomás. / / Cedida

Carolina Sertal

Vigo

La coordinadora de Recursos Humanos y Finanzas en Gaza de Médicos Sin Fronteras, Ana Isabel Tomás Tudela, intervendrá este miércoles a las 12.45 horas en el Auditorio de Afundación para dar a conocer relatos del pueblo palestino.

Se cumple un año desde el nuevo asedio de Israel sobre la Franja de Gaza y esta misma semana se han notificado nuevos bombardeos en una escuela, un centro de ayuda humanitaria y un hospital, ¿qué noticias les llegan desde allí?

Médicos Sin Fronteras está presente en tres centros de salud propios y prestando apoyo a un hospital, en maternidad, pediatría y UCI, y también efectuando distribución de agua potable. Tal y como comentas, los bombardeos son la cotidianidad. Cada día ves a personas desplazándose, la situación es catastrófica, no existe un lugar seguro en toda la Franja de Gaza actualmente y la población lleva mucho tiempo sufriendo eventos traumáticos; no pueden superar lo que han vivido, desde perder familiares o a la familia completa, y no pueden avanzar ni superar eso porque viven con miedo a la caída de las bombas, a no saber si al volver su tienda improvisada va a estar o si han asesinado a algún familiar. Viven en una incertidumbre constante, en tiendas improvisadas, sin acceso a servicios básicos como agua potable y electricidad. Desplazarse dentro de la Franja es muy complicado y eso dificulta el acceso a los centros de salud o a los pocos hospitales que quedan, por lo que las necesidades médicas y humanitarias son enormes.

¿Qué pacientes están recibiendo y cuál es el porcentaje de población al que están asistiendo?

Estamos atendiendo a pacientes con traumatismos físicos, con patologías relacionadas con la falta de acceso a agua potable, además de mucha patología dermatológica, y también asistiendo los traumas psicológicos. Nos centramos en la población más vulnerable, casi todos los pacientes son niños y mujeres. En el caso de ellas, en la salud materna, que ya te puedes imaginar lo que supone para una mujer embarazada el poder hacer cualquier seguimiento en estas condiciones, así como no saber si va a poder dar a luz en un centro o en un campo de refugiados, consciente de que si hay cualquier complicación no va a tener asistencia... Se estima que en la Franja hay dos millones de personas y el 90% se ha desplazado al sur, en donde estamos.

¿Es posible el desplazamiento del personal sanitario?

Aunque todavía existe algún hospital activo punto de referencia de ambulancias, los caminos no son carreteras, son caminos llenos de gente desplazándose y un trayecto de 10 minutos se convierte en dos horas, así que es la gente la que se organiza, transportando a heridos en carros tirados por burros o en motocicletas a gas. El sistema de salud ha colapsado, porque ha habido ataques directos para ello.

¿Cómo puede ayudar la ciudadanía de otros países ahora mismo?

Denunciando esta situación para que haya un alto al fuego que sea efectivo, presionando a los estados que han sido cómplices directa o indirectamente, prestando apoyo militar y diplomático a Israel.

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