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Muchas más muertes por ahogamientos que por accidentes de tráfico en Canarias

En lo que va de año, 30 personas han fallecido en el mar o en piscinas, ocho de ellas en julio

La mayoría de estos sucesos tienen lugar en zonas sin vigilancia

Un socorrista de Cruz Roja en la playa de Las Teresitas.

Un socorrista de Cruz Roja en la playa de Las Teresitas. / Arturo Jiménez

Santa Cruz de Tenerife

En Canarias mueren más personas al año por ahogamientos que en accidentes de tráfico. En lo que va de año, una treintena de personas ha perdido la vida tras ahogarse en las costas canarias. De ellas, ocho lo hicieron el pasado mes de julio. Unas cifras que siguen la tendencia de 2023, que se cerró con 34 fallecidos en carreteras y 52 en el mar, según informa la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo -datos que no incluyen a las muertes de migrantes en la ruta del Atlántico-.

El responsable de playas de Cruz Roja en Santa Cruz de Tenerife, Eric Quintero, desvela que la gran mayoría de ahogamientos mortales se producen en zonas no vigiladas. También en horarios en los que no hay socorristas. Las playas son el entorno en el que se produjo mayor mortalidad, con el 54% de los casos, seguido de puertos y zonas de costa (35%), piscinas naturales (7%) y piscinas (4%). Los datos recogidos por la Federación avalan el testimonio de Quintero, pues el perfil de los fallecidos es el de un hombre, en el 83,5% de las veces, mayor de 55 años, de nacionalidad española y que ha fallecido en una playa sin supervisión entre las 10:00 y las 20:00 horas.

Un servicio imprescindible

Junto al bañador, la crema solar y la sombrilla, el servicio de playas de Cruz Roja se ha convertido en un imprescindible del verano en las costas canarias. La institución cuenta con más de seis décadas de experiencia en playas y zonas de baño interiores de todo el territorio español. Su fin principal es que la población del Archipiélago disfrute de manera segura de sus playas. Las picaduras, los esguinces, las luxaciones y otras curas son las principales razones de las asistencias que el equipo realiza durante el periodo estival. Sin embargo, el responsable provincial de playas asegura que la prioridad para su equipo es la prevención. «Ya sea con el color de las banderas o hablando de manera directa con los bañistas, nosotros intentamos prevenir los ahogamientos que, por desgracia, este año han sido bastantes», aclara.

En 2023, 266 profesionales de salvamento de Cruz Roja velaron por un baño seguro en 46 playas y piscinas de diez municipios de Canarias. El amplio despliegue de socorristas acuáticos (203), patrones de embarcación (23), técnicos de emergencias sanitarias (16), enfermeras/os (8) y responsables (16) atendió a 3.950 personas durante los meses de verano.

Quintero explica que las labores de salvamento y rescate son la principal área en la que trabaja la institución de voluntariado. Sin embargo, su presencia en las playas canarias también se extiende al acompañamiento y la inclusión de personas con movilidad reducida. Su papel es especialmente importante para esta población. Cada año, Cruz Roja habilita zonas de baño y ocio adaptadas en varias playas, dotadas con dispositivos como sillas anfibias, muletas y chalecos salvavidas. El objetivo es que quienes precisen de estos elementos puedan acceder al agua con absoluta seguridad en once de las cuarenta playas en las que Cruz Roja está presente en Canarias.

Cruz Roja atendió en las costas de las Islas a 3.950 personas durante el verano del año pasado

Alrededor de 1.200 personas disfrutan cada año de estos servicios en el Archipiélago en zonas de baño tan diversas como las playas de las Teresitas (S/C de Tenerife), La Arena-Mesa del Mar (Tacoronte), Radazul (El Rosario), El Médano (Granadilla de Abona). Mientras que, en la provincia de Las Palmas, en las playas de El Puertillo (Arucas), del Inglés, San Agustín y Maspalomas (San Bartolomé de Tirajana), Pozo Izquierdo (Santa Lucía de Tirajana), Las Canteras (Las Palmas de GC) y playa Blanca (Yaiza-Lanzarote).

Cruz Roja no solo forma a los socorristas que vigilan las playas y que, por estas fechas, realizan sus prácticas en playas de Granadilla o Santa Cruz, como Almáciga. La entidad también realiza talleres en los que los profesionales explican a los bañistas cómo prevenir ahogamientos e imparte charlas en colegios en las que enseña a los más pequeños las diferentes banderas y señalizaciones.

Para disfrutar de un verano seguro en las costas canarias, Cruz Roja comparte recomendaciones como vigilar a los niños en todo momento, bañarse en zonas habilitadas, respetar la señalización y las indicaciones del equipo de socorristas, evitar las comidas copiosas para facilitar la digestión y la exposición solar directa durante el mediodía, en especial entre las 12 y 16 horas.

‘Con cabeza sí, de cabeza no’

Durante el verano, Cruz Roja colabora con el Hospital Nacional de Parapléjicos, la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (Sermef) y la Federación Nacional de Asociaciones de Lesionados Medulares y Grandes Discapacitados Físicos (Aspaym) para prevenir accidentes por una mala zambullida. El pasado año, en España, hubo siete ingresos con resultado de tetraplejia por este motivo. El perfil de estas personas es el de un varón, con rango de edad entre 15 y 44 y media de 32 años. La prevención de estas lesiones medulares severas es fundamental para la entidad porque todas podrían haberse evitado. Por ello, Cruz Roja puso en marcha la campaña Con cabeza sí, de cabeza no, un llamamiento a la prudencia de los bañistas.

Las principales pautas a seguir en este sentido son: conocer la profundidad, evitar el consumo de alcohol si se planea un baño, hacer una entrada cauta y consultar la señalización. En caso de accidente, señalan que es fundamental actuar de forma rápida, solicitar ayuda de inmediato, no mover al lesionado y mantener la calma en todo momento.

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