Tenerife está pendiente de las consecuencias de la borrasca Óscar, que ya se está dejando sentir en la Isla, y ya Santa Cruz de Tenerife ha activado el Plan Municipal de Emergencias (PEMU) ante la alerta por lluvias. Por su parte, La Laguna ha puesto en marcha el Centro de Coordinación Operativa Local (Cecopal).
Santa Cruz de Tenerife
La activación del Plan de Emergencias en la capital chicharrera implica, como medida preventiva, a partir de este miércoles, a las 08:00 horas, el cierre de las instalaciones municipales al aire libre y aquellas que conlleven la afluencia de público, ya sean deportivas (polideportivos, piscinas municipales, canchas deportivas, etc.), culturales y cualquier otra de ocio y esparcimiento.
Esta activación se fundamenta en la información recabada por el consistorio y la actualización de la alerta por lluvias realizada hace unas horas por parte de la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno de Canarias. También hay que recordar que en estos momentos está vigente otra alerta por vientos que también afecta a la isla de Tenerife. La resolución municipal supone la suspensión de cualquier actividad de ocio, tanto deportiva como cultural y de similar naturaleza que suponga la afluencia de público y que estuviera previsto realizar a partir de las 08:00 horas de mañana y hasta nueva comunicación.
Todos los servicios municipales están preavisados para la resolución de las posibles incidencias que se puedan producir en el término municipal, haciéndose además un llamamiento a la población para que evite los desplazamientos innecesarios o la exposición a situaciones de riesgo. Desde este lunes, personal municipal y de las empresas de servicios han venido revisando y evaluando lugares e infraestructuras que pudieran verse afectadas por las lluvias que se prevén derivadas de la borrasca Óscar.
Como en otras alertas por fenómenos meteorológicos adversos se insiste en pedir a la ciudadanía que actúe con responsabilidad y evite, lo máximo posible, ponerse en situación de riesgo, ya que las fuertes lluvias o el viento pueden causar imprevistos tanto en carreteras como vías del municipio, así como en mobiliario urbano y en infraestructuras públicas y privadas.