Canarias dispensa de forma dispar la inyección para pacientes con VIH

El nuevo fármaco solo está disponible en el Hospital Universitario Insular de Gran Canaria y en los centros de Tenerife, La Palma y Lanzarote

Detalle de la preparación de un inyectable.

Detalle de la preparación de un inyectable. / El Día

Canarias dispensa de forma dispar la inyección para pacientes con VIHCuatro meses después de que la Agencia Española del Medicamento diese la luz verde para incluir el primer tratamiento inyectable para pacientes con virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) su implementación en Canarias está siendo dispar. La gran novedad de esta nueva terapia, disponible en toda la Península, radica en que combina dos medicamentos, el cabotegravir y la rilpivirina, y es el primero de acción prolongada. Tiene la propiedad de irse liberando gradualmente en el cuerpo de manera que su efecto permanece 60 días. Es decir, el paciente solo necesita inyectarse el medicamento cada dos meses frente a la toma diaria de las pastillas, que es el tratamiento habitual hasta ahora.

La ventaja mayor es que ya no se necesita tomar diariamente la medicación antirretroviral con el desgaste psicológico que implica no olvidarse ningún día de la pastilla por temor a perder la adherencia adecuada.

Disponibilidad

De momento, este fármaco está disponible como una de las opciones de tratamiento solo en cuatro centros hospitalarios de las Islas.

Así, en el caso de Gran Canaria solo el Hospital Universitario Insular de Gran Canaria ha dado el visto bueno para su incorporación dentro de las opciones terapéuticas para pacientes con VIH. En el caso de Tenerife los dos centros hospitalarios, tanto el Hospital Universitario de Canarias (HUC), como el Hospital de La Candelaria sí lo están dispensando al igual que el Hospital Doctor José Molina Orosa de Lanzarote y el Hospital General de La Palma.

No se ha realizado un estudio sobre el coste-eficacia para apuntalar el rechazo a su dispensación

El Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín no ha dado el visto bueno a la incorporación de este nuevo y novedoso tratamiento, tras rechazarlo hace unos días la Comisión de Farmacia del citado centro hospitalario. Dicha comisión es la que decide que fármacos se pueden utilizar o no tras oír a los expertos. Se da la circunstancia que esta no cuenta entre sus miembros con especialistas en VIH ni en enfermedades infecciosas.

Excluidos

Esta situación está derivando, según varios expertos consultados, en una discriminación de los pacientes con VIH de Gran Canaria en función del municipio, e incluso de la calle o el barrio donde residan. Lo que lleva a una desigualdad dentro del propio Servicio Canario de la Salud (SCS). Es decir, la población del norte y centro de Gran Canaria junto con la mayor parte de la ciudadanía de la capital grancanaria no tienen acceso a este tratamiento al ser el Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín su centro de referencia. Mientras que los residentes en el cono sur de la capital grancanaria y en toda la zona sureste, sur y oeste de la Isla si pueden acceder al mismo al haberse aprobado su uso en el Hospital Universitario Insular.

Esta diferencia es aún más si se compara con otras Islas. Mientras en Tenerife, Lanzarote y La Palma todos los pacientes con VIH van a tener la posibilidad, si su médico lo considera oportuno y cumple los requisitos, de acceder a este tratamiento inyectable, parte de la población de Gran Canaria no tendrá esos mismos derechos.

Apuntan que con el rechazo a incluir este tratamiento se hurta el derecho de elección del paciente

Fuentes conocedoras de los hechos apuntan que la decisión del Hospital Negrín no es firme y que esta puede cambiar en el futuro, aunque el hecho es que de momento los pacientes con VIH adscritos a este centro hospitalario se han quedado fuera de este novedoso tratamiento.

Autonomía

Además añaden que no es de recibo que de un mismo tratamiento no se valore el coste-eficacia en un único hospital del SCS mientras que en el resto sí se haga, subrayando dicha disparidad de criterio que termina repercutiendo en el paciente. En este punto subrayan que no se ha realizado un estudio sobre el coste-eficacia de este tratamiento para apoyar la negativa de su aprobación. El hecho de que no esté disponible en todos los centros hospitalarios del Archipiélago choca también con la propia ley de autonomía del paciente que establece que estos tienen derecho a acceder a la opción terapéutica que consideren mejor entre las disponibles. 

Al no incluirla entre las opciones se está hurtando esta posibilidad sin ni siquiera tener en cuenta la opinión del paciente. 

Cabe recordar que la inyección para pacientes con VIH no es en ningún caso un tratamiento generalizado ya que su administración solo se prevé en casos concretos, como pacientes con una carga indetectable previa y con una serie de condiciones preestablecidas.

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