La DGT puede multarte por este sorprendente motivo (y la cantidad es para pensárselo)

Se aproximan muchas fechas festivas con cenas de empresa y reuniones de amigos y familia. La solución inmediata para no conducir tras haber bebido es dejar que otra persona conduzca coger un taxi, un Uber, Cabify u otros medios de transporte como la guagua o el tranvía. Nuestra seguridad es lo primero.

¿Pero y si pasan las horas, nos sentimos más o menos bien pero el cuerpo aún sigue procesando el alcohol ingerido?. Los efectos al conducir pueden ser fatales y es que Tráfico señala que con resaca se duplica la dificultad para conducir y se sobrepasan en cuatro veces los límites de velocidad.

Efectos de la resaca

La Dirección General de Tráfico (DGT) recuerda en sus redes sociales el peligro de conducir con resaca.

Tráfico detalla que las alteraciones después de beber son diversas: Hemodinámicas: aumenta el trabajo cardíaco; Neurológicas: la actividad del cerebro se ralentiza hasta 16 horas después de desaparecer el alcohol; Hormonales: diuresis (más orina) y deshidratación.

Multas

Entonces, ¿la DGT puede poner una multa a un conductor con resaca? La respuesta está directamente relacionada con la cantidad de alcohol que quede en nuestro cuerpo: si supera la tasa permitida, sí podría sancionar al conductor que la rebase.

Es difícil que suceda el día después de a haber bebido, a menos que se haya hecho en grandes cantidades o que otros factores puedan afectar a nuestros organismo como puede ser la ingesta de medicamentos o que no se hayan pasado los efectos. No todas las personas procesan el alcohol de la misma manera, por lo que una pequeña cantidad en una persona puede hacer lo mismo que una gran ingesta en otra.

Existen otros motivos para que la DGT, la Guardia Civil o la Policía Local nos multe, como la posibilidad de generar situaciones de riesgo a consecuencia de conducir con resaca. El conductor podría ser sancionado con 200 euros si un agente aprecia conducción negligente y la considera como una infracción grave.

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Tasa de alcohol máxima permitida

A pesar de que la DGT pone el acento en que la única tasa de alcohol segura para conducir es cero, cabe recordar que las sanciones se ejecutan con una cifra superior a los 0,25 miligramos por litro en aire espirado. La cantidad máxima permitida en sangre es, a su vez, de 0,50 gramos por litro.

En el caso de los conductores noveles, la tasa de alcohol máxima permitida es de 0,15 miligramos en aire espirado y de 0,30 gramos por litro en sangre. El mismo límite se aplica a los conductores profesionales.

La multa por dar positivo en alcohol es de 200 euros, con cuatro a seis puntos de carné que se pierden, en función de la tasa.