Canarias se suma a la detección precoz del cáncer de pulmón

El Servicio Canario de la Salud (SCS) participará en el proyecto Cassandra, una iniciativa nacional impulsada por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y distintas asociaciones científicas destinada a aportar evidencias sobre el cribado del cáncer de pulmón en el país y contribuir a facilitar su implementación en un futuro.

«Este es el cáncer que más muertes provoca y es muy importante que la comunidad canaria esté implicada en el programa», valora la doctora Marta Lloret Sáez-Bravo, jefa del servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín. Según confirmó este viernes la directora del SCS, Elizabeth Hernández, aún se está trabajando en los preparativos y la intención es que el proyecto arranque cuando se logren definir los criterios para determinar quiénes serán los candidatos.

Según la información que maneja la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), la supervivencia de los pacientes aquejados de cáncer en España se ha duplicado en las cuatro últimas décadas y es muy probable que siga aumentando en los próximos años. «Las mejoras que se han producido en los tratamientos han conseguido incrementar las tasas de supervivencia y alcanzar cifras que nos dejan muy satisfechos a todos los profesionales», apunta la facultativa del centro de referencia del área norte de la Isla.

Resultados

Y es que los nuevos tratamientos de inmunoterapia, combinados en muchos casos con radioterapia de alta precisión, pueden presumir de óptimos resultados en el manejo de neoplasias como el melanoma y los tumores de pulmón. «Hace tan solo cinco años era impensable que esto fuera posible», enfatiza la especialista. Pero los buenos efectos de la innovación terapéutica se extrapolan también a los cánceres de mama y próstata, pues la supervivencia de los afectados a los cinco años ya ronda el 90%. Ahora bien, el cáncer de mama triple negativo continúa siendo un reto para la ciencia. «Se están investigando nuevas terapias que ya han demostrado mejores resultados en las pacientes. Hay que decir que, afortunadamente, este tipo de tumor representa menos del 20% de los diagnósticos de cáncer de mama», informa.

Tal y como explica la doctora Lloret, la radioterapia de alta precisión permite controlar la enfermedad a nivel local. No obstante, en función del tipo de patología, además de con inmunoterapia puede combinarse con quimioterapia o determinadas terapias dirigidas. «A nivel de tratamientos sistémicos, no solo contamos con la clásica quimioterapia. Por suerte, disponemos de terapias dirigidas que actúan contra determinadas dianas terapéuticas y que producen menor toxicidad».

El campo de la cirugía es otro de los escenarios que ha registrado innovaciones, pues las técnicas que se emplean son cada vez más precisas. Lo mismo ha sucedido con los métodos diagnósticos, lo que ha permitido a los especialistas detectar mejor los tumores y de una forma más rápida.

A pesar de todo, la doctora reivindica la necesidad de seguir avanzando en el abordaje de las neoplasias, especialmente en aquellas que tienen un peor pronóstico. Pero, ¿qué patologías entran dentro de este grupo? Básicamente, los tumores cerebrales malignos como los glioblastomas, el cáncer de páncreas y los sarcomas. «El cáncer de pulmón y el melanoma son dos claros ejemplos de que la investigación da frutos. De hecho, estamos consiguiendo controlar estas patologías de una forma que nadie imaginaba», asevera.

A juicio del doctor José Almenarez, presidente de la Asociación Canaria de Oncología Médica (Ascom), la inmunoterapia ha abierto un campo muy amplio dentro de lo que se denomina oncología de precisión. «Gracias a esto, podemos identificar desde el punto de vista biológico y molecular los oncogenes mutados o alterados que son responsables de la reproducción celular maligna. Se trata de una forma diferente de abordar la enfermedad, porque en realidad es el propio individuo el que reconoce las células malignas para que sus sistema inmunológico las ataque y las destruya», enfatiza el oncólogo. «En pulmón, por ejemplo, el porcentaje de curación en pacientes con enfermedad avanzada es bastante alto. Antes, no sobrevivía más de un año», agrega.

Por otro lado, las células CAR-T están siendo objeto de muchos estudios que han demostrado sus efectos positivos en tumores hematológicos como la leucemia o algunos tipos de linfomas. «En esta área es donde ha habido más desarrollo de este tipo de terapia. Ya se empieza a usar en tumores sólidos, pero está todavía en una etapa de investigación más temprana».

Cabe resaltar que la Ascom celebra este año su 26º aniversario. Ahora mismo, el colectivo está desarrollando proyectos que buscan brindar apoyo a los profesionales. «Desde el pasado año, los residentes pueden optar a una beca para hacer rotaciones de servicio en el extranjero o en hospitales punteros del país», cuenta José Almenarez.

La formación, en cambio, implica a todos los profesionales y se realiza, sobre todo, a través de congresos y conferencias. «El objetivo es que sirvan para enriquecer y potenciar sus conocimientos, si bien es cierto que faltan especialistas en el Archipiélago y se nota el grado de desgaste en algunos de ellos. Por esta razón, no podemos bajar la guardia», advierte.

Otro de los propósitos del colectivo pasa por crear un Plan Oncológico en Canarias de Atención Integral que permita potenciar la investigación en todos los hospitales del Archipiélago. «No queremos que la investigación clínica se realice solo para las islas que cuentan con hospitales universitarios, también queremos que las no capitalinas tengan la posibilidad de acceder fácilmente a los avances», señala Almenarez.

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