Cambio climático

Administración y empresas: juntos para impulsar los gases renovables y frenar el cambio climático

Administración y empresas juntos para impulsar los gases renovables y frenar el cambio climático

Administración y empresas juntos para impulsar los gases renovables y frenar el cambio climático / Aleksandr178

Los gases renovables son de los pocos vectores energéticos que pueden utilizarse tanto para cubrir demanda energética en el sector residencial, como en procesos industriales de alta temperatura , en el transporte y para generar electricidad. Por eso, son ya numerosas las Administraciones Territoriales que cumpliendo con el Plan nacional integrado de Energía y Clima 2021-2030 se han apresurado a introducirlas en sus ámbitos locales.

Con el Plan REPowerEU lanzado por la UE se establecieron los objetivos para España, que es el tercer país europeo con mayor potencial de desarrollo de los gases renovables y, de acuerdo al último estudio publicado por Sedigas, cuenta con un potencial de producción de biometano de 137 TWh/año. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos del sector público y privado por controlar y aumentar la inversión en gas renovable, el sector necesita un compromiso firme de las Administraciones territoriales para construir una base sólida y estable para su avance y liberar todo su potencial. En Cataluña, por ejemplo, ya tenemos un ejemplo de éxito escalable a otras comunidades.

Infraestructuras reutilizables

En junio de 2021 se marcó un hito en la transición energética de España con la primera inyección de gas renovable procedente de vertedero en la red de distribución en el Parc de l'Alba de Cerdanyola del Vallés (Barcelona), cerca del vertedero de residuos de Elena. Este proyecto puso de manifiesto la capacidad de España para llevar a cabo este tipo de actividades debido a las inversiones realizadas en los últimos años para potenciar su red de distribución, la disponibilidad de la infraestructura gasista en España y su contribución a la garantía de suministro.

El objetivo es que en 2050 todo el gas canalizado en la red sea de origen renovable.

Para lograr este ambicioso objetivo es necesario un plan de apoyo a los gases renovables que marque los objetivos a seguir e incentive la colaboración público-privada en los proyectos. En esta línea, y siguiendo la estela que nos llevará hacia el objetivo de 2050, el pasado mes de noviembre, el Consorci Besòs Tordera (CBT) y el Consorci per a la Gestió dels Residus del Vallès Oriental (CGRVO) anunciaron la puesta en marcha de su primer proyecto de producción e inyección de biometano en la red de Nedgia.

Proyecto BioVO

Este proyecto es un esfuerzo conjunto entre la Generalitat y los dos consorcios y marca un hito importante en su compromiso con la sostenibilidad y las energías renovables. La idea es utilizar los residuos orgánicos de la región para producir biometano, que es una fuente de energía limpia y renovable. Esto reducirá la cantidad de residuos que van a parar a los vertederos y contribuirá a disminuir las emisiones de las redes de electricidad y gas de la región.

El proyecto conjunto se llama BioVO, que pretende producir biometano aprovechando parte del biogás producido durante las operaciones de procesamiento en la Planta de Digestión Anaerobia y Compostaje del Consorci per a la Gestió dels Residus del Vallès Oriental y en la EDAR de Granollers del Consorci Besòs Tordera.

Este proyecto tiene un coste de 2.800.000 euros y ha sido subvencionado con más de un millón de euros por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), con cargo a los Fondos Europeos de Desarrollo Regional de la Unión Europea (FEDER). Josep Monrà, presidente del Consorcio Besòs Tordera, afirmó que no existe ningún otro proyecto similar en Cataluña ni en España, y mencionó que fue fácil ponerse de acuerdo para ponerlo en marcha y encontrar el lugar adecuado para ello.

Por su parte, el presidente del Consorcio para la Gestión de los Residuos del Vallès Oriental, Albert Camps, ha destacado que “los gases renovables se presentan como la opción idónea para la reducción de las emisiones de CO2, y son una energía que refuerza el concepto de economía circular”. Este proyecto de desarrollo industrial, de los pioneros en Cataluña y España, está orientado a transformar el sector energético hacia un modelo más sostenible y eficiente. Además, el proyecto no sólo creará puestos de trabajo e inspirará el desarrollo económico de la zona, sino que también ofrecerá nuevas oportunidades a empresas y particulares. La CBT y la CGRVO están convencidas de que esta iniciativa no sólo contribuirá a reducir las emisiones e iniciar la producción de energía sostenible en la localidad, sino que también ayudará a estimular la economía regional*.

La inyección de gas renovable es una tecnología revolucionaria que puede tener un gran impacto en el futuro de nuestro planeta. Al sustituir los combustibles fósiles por gas renovable, podemos reducir nuestra huella de carbono y ayudar a proteger nuestro medio ambiente. Con una inversión e investigación continua, la inyección de gas renovable tiene el potencial de marcar una gran diferencia en la lucha contra el cambio climático.

Red de gas

La inyección de gas renovable supone tomar el biometano y el hidrógeno e inyectarlos directamente en la red de gas existente. Este gas renovable se emplea para alimentar motores de combustión en el sector del transporte y turbinas para la generación de electricidad. También se utiliza para generar calor en los procesos industriales y usos residenciales.

La mayor ventaja de la inyección de gas renovable es que tiene casi cero emisiones, lo que significa que no contribuye al cambio climático ni a la contaminación atmosférica. A diferencia de los combustibles fósiles, como el carbón y el petróleo, el gas renovable no produce dióxido de carbono, óxidos de nitrógeno ni dióxido de azufre. Esto significa que la inyección de gas renovable es una forma mucho más limpia y ecológica de alimentar nuestras redes de transporte y electricidad.

También puede utilizarse para ayudar a reducir los costes energéticos. Al sustituir el gas natural por gas renovable, podemos reducir nuestra dependencia de los costosos combustibles fósiles y aprovechar el ahorro de costes asociado a su producción. Este ahorro de costes puede reinvertirse en otras iniciativas de energía sostenible, lo que contribuye a reducir aún más nuestra dependencia de los combustibles fósiles.

*Fuente: Retema, revista técnica de medio ambiente.