La ciencia canaria capta 2,1 millones para estudiar la transición verde de las Islas

Dieciocho grupos de investigación de Canarias han captado 2,1 millones de euros de una nueva convocatoria estatal para investigar las mejores formas de combatir el cambio climático en nuestro entorno así como la adaptación a las nuevas necesidades digitales de la población y la economía isleñas. La convocatoria, titulada Proyectos Estratégicos Orientados a la Transición Ecológica y la Transición Digital, promulgada por el Ministerio de Ciencia,  a través de la Agencia Estatal de Investigación, ha regado en toda España 288,6 millones de euros a 1.711 proyectos. 

El objetivo de estas ayudas,  financiadas con fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, es fomentar las actividades de I+D+I en toda España, en aras de incrementar la competitividad y el liderazgo internacional de la ciencia y la tecnología españolas a través de la generación de conocimiento científico y mediante una investigación de calidad orientada a la transición ecológica y a la transición digital.

Las universidades canarias llevarán a cabo ocho proyectos cada una

Gracias a esta concesión, Canarias podrá llevar a cabo 18 proyectos de investigación climática y de digital, de los que ocho se realizarán en la Universidad de La Laguna (ULL), otros ocho en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), uno en el Instituto de Productos Naturales y Agrobiología (IPNA-CSIC) y un último en el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER). La tarta se reparte casi a partes iguales entre las dos universidades públicas. La ULPGC ha logrado 1,1 millón de euros, la ULL se embolsará cerca de otro millón de euros (994.750 euros). Mientras, el proyecto concedido al IPNA está dotado de 143.750 euros y el del ITER de 74.750 euros. Las áreas en las que se llevarán a cabo estas investigaciones son diversas.

Los investigadores que han podido acceder a estas ayudas pertenecen a la rama de la Economía y sus aplicaciones, la Química, la Ciencia y Tecnología de los Alimentos, Ingeniería mecánica, naval y aeronáutica, Energía, Microelectrónica, nanotecnología y fotónica y hasta Oceanografía o Tecnología de las Comunicaciones. 

"Estamos contentos porque además de áreas más naturales, como Química, Física o Ingeniería, también se han concedido proyectos a áreas más humanísticas, como Educación", reseña el vicerrector de investigación de la ULL, Ernesto Pereda. Lo mismo ha ocurrido en la ULPGC, donde también han conseguido proyectos en el área de Educación, Esta convocatoria del Ministerio de Ciencia es de nueva creación. Se formuló para poder cumplir con uno de los retos establecidos desde la Unión Europea, la doble transición o twin transition, que aboga por aprovechar las herramientas digitales (como la inteligencia artificial, la robótica o el diseño digital) para realizar una transición verde hacia una economía descarbonizada y respetuosa con el medio ambiente. Esta doble transición es clave para, además, adoptar un modelo de desarrollo circular, transformando las cadenas de valor industriales lineales para minimizar los residuos y la contaminación, aprovechando mejor los residuos generados y garantizando los estándares ambientales.

El Ministerio de Ciencia ha dividido los proyectos concedidos en dos temáticas: transición ecológica y la transición digital

El Ministerio de Ciencia ha dividido los proyectos concedidos en dos temáticas diferentes, aquellos que se centran únicamente en la transición ecológica y aquellos dedicados a la transición digital. En concreto, los proyectos de transición ecológica están dirigidos a la mitigación del cambio climático, la adaptación al cambio climático, el uso sostenible y la protección de los recursos hídricos y marinos, la economía circular, la prevención y control de la contaminación y la protección y recuperación de la biodiversidad y los ecosistemas.  Para avanzar en estos objetivos se impulsará la generación de conocimiento científico, el desarrollo de tecnologías o el soporte a las políticas medioambientales aplicadas a las actividades productivas, a la protección de los recursos naturales y a la calidad de vida de las personas y de la sociedad en su conjunto.

Por su parte, los proyectos de transición digital pretenden potenciar las infraestructuras, competencias y tecnologías necesarias para una economía y una sociedad digital a través de la digitalización toda la cadena de valor en sectores tractores. Para ello, se hará uso de las sinergias y oportunidades de los nuevos desarrollos tecnológicos y de gestión de datos, usando tecnologías digitales disruptivas y poniendo en el centro del proceso a las personas y sus derechos digitales.

La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, aprovechando la publicación de la resolución de esta nueva convocatoria, ha destacado "la firme apuesta del Gobierno de España para desarrollar soluciones más verdes y sostenibles y avanzar en la digitalización a través de la ciencia y la innovación". 

Sin embargo, es poco probable que esta línea de financiación se mantenga en el tiempo. "Al estar asociada exclusivamente a los fondos Next Generation; no va a volver a publicarse el año que viene", explica Pereda, que insiste en que ya en su día les advirtieron de que esta línea de financiación sería más bien una "flor de un día" que habría que aprovechar. Los investigadores temen que esta anunciada reducción de fondos se traslade a otras ayudas de Agencia Española de Investigación. "Sería muy negativo", resalta Pereda. 

La ULL recortará los planes de apoyo a sus científicos ante la falta de fondos

Por su parte, el consejero de Transición Ecológica, José Antonio Valbuena, ha valorado la predisposición de los científicos canarios a participar en este tipo de convocatorias competitivas a nivel nacional, dado que son ya "varios millones de euros" los que han conseguido para desarrollar la ciencia climática en el Archipiélago. "La ciencia es el camino para llevar a cabo una correcta lucha contra el cambio climático", valoró. Asimismo, destacó el "volumen de conocimiento" que se ha obtenido sobre el impacto del cambio climático en Canarias gracias a los investigadores y, especialmente, a la voluntad de las dos universidades públicas del Archipiélago.  

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