Entrevista a Rafael Sala Mayato, físico de la Universidad de la laguna y divulgador

Rafael Sala Mayato: «El tiempo es muy intrigante porque no se puede captar con los sentidos»

"España está viviendo una etapa interesante en cuanto a la divulgación científica", afirma

Rafael Sala Mayato en su despacho en la facultad de Física de la ULL.

Rafael Sala Mayato en su despacho en la facultad de Física de la ULL. / Carsten W. Lauritsen

Verónica Pavés

Verónica Pavés

Rafael Sala Mayato es consciente de que los científicos españoles guardan una «deuda» con la sociedad y considera que la divulgación científica es la mejor forma para afrontarla. En su libro La Estela Invisible, el físico de la Universidad de La Laguna lleva a cabo un relato científico que acerca el concepto del tiempo a la población a través de un viaje sin precedentes por la mecánica cuántica. 

¿Qué le motiva a escribir La Estela Invisible?

Acababa de publicar, junto a otros investigadores, un libro en la editorial alemana Springer, titulado Time in Quantum Mecanics. Era una obra muy técnica para quienes nos dedicamos a este campo. Un día le llevé el libro a mi amigo Carlos Elías y me propuso escribir algo similar pero para todo el mundo. Como científico tienes un bagaje gracias a que el Estado y a el pueblo te han permitido investigar y viajar a otros países. Me parecía una forma bonita de devolverle a la gente el dinero que han depositado en nosotros.

¿Por qué ese título?

Queríamos buscar un título bonito. Todos tenemos la idea de que el tiempo es algo que fluye, como una estela. Además como hablamos de su relación con el nivel cuántico, pensé que dicha estela debería ser invisible porque no lo podemos captar con nuestros sentidos directamente. De esta manera, además, se aúna la visión clásica del tiempo y lo que no es observable con nuestros sentidos inmediatos que es la vista invisible.

Cuando se introduce en el mundo de la divulgación de la Física, ¿cómo encuentra el panorama en España?

Me consta que a un nivel muy bueno redes sociales, y creo que eso también ha trascendido a nivel editorial. España está viviendo un buen momento de la divulgación científica. Ha llegado tarde, como siempre, porque esto desde hace muchos años se venía haciendo en otros países. Pero creo que ahora mismo se está viviendo una etapa decente e interesante.

¿Por qué eligió escribir sobre el tiempo y la mecánica cuántica?

El tiempo es una magnitud física que se mide con muchísima precisión. La más precisa que existe. Pero también es muy intrigante porque el concepto de tiempo no lo podemos captar con los sentidos. Por otro lado, se ha hablado bastante a nivel divulgativo del tiempo en su relación con la Teoría de la Relatividad de Einstein y en su relación con la flecha del tiempo y la muerte termodinámica del universo, pero no desde el punto de vista de la mecánica cuántica. De alguna manera cubre una laguna que existía en las estanterías de la divulgación.

"La computación cuántica resolverá problemas, pero no desterrará al ordenador clásico"

La comprensión de la mecánica cuántica suele ser intrincada para la población, ¿por qué cree que es tan complicado?

Básicamente tiene relación con cómo captamos las magnitudes a través de nuestros sentidos. Cuando uno intenta profundizar en cómo es el universo y se va a lo más pequeño, las cosas no se pueden captar a través de ellos. En cambio, debemos utilizar aparatos de medida que nos den pistas para intentar entender qué es lo que está ocurriendo a esos niveles inobservables. Encima, en esa interacción entre el mundo microscópico de los sistemas que queremos comprender y el mundo macroscópico de los aparatos de medida se produce una interacción que nos revela una naturaleza opuesta y contraria a lo que el sentido común dice y que nos lleva a plantearnos situaciones paradójicas que no podemos entender.

En su obra habla de los problemas existentes entre el tiempo y la física cuántica, ¿cuáles son?

Hay muchas situaciones delicadas todavía que son difíciles de entender. En el libro se relata, por ejemplo, la incertidumbre tiempo-energía que tiene que ver con el hecho de que, a nivel microscópico, no puedes conocer con absoluta precisión la posición y la velocidad de una partícula al mismo tiempo. Otro problema interesante es el del entrelazamiento cuántico, un descubrimiento que este año se ha llevado el Premio Nobel, y que propone que en un sistema de este tipo, independientemente de lo lejos que esté, si se actúa sobre uno de ellos el otro también cambia su estado. Otro es el efecto Zenón cuántico relacionado con la paradoja de Zenón que nos dice que cuando observamos determinados sistemas continuamente estos dejan de evolucionar en el tiempo. Y por supuesto el campo de los relojes atómicos, que los nuevos relojes puedan medir intervalos de tiempo tan pequeñas tiene tela.

La mecánica cuántica ha transformado la sociedad, ¿cómo lo hará en el futuro?

En el futuro estarán los famosos ordenadores cuánticos, aunque están muy lejos de conseguirse hasta un punto de ser manejables por casi cualquier persona. Queda mucho por caminar y no va a ser la panacea. Si bien es cierto que resolverán muchos problemas, el ordenador clásico no va a pasar a la historia. Los ordenadores cuánticos serán muy buenos para generación de fármacos, materiales nuevos y para resolver problemas biológicos a nivel molecular.

¿La mecánica cuántica ayudará también a conocer mejor el universo?

Sí. Hoy día tenemos una teoría que unifica casi todos los campos de la física. Todos, a excepción de la Teoría de la Relatividad general y la mecánica cuántica. Esas dos teorías en principio podrían llegar a ser contradictorias. No hay manera de hacerlas compatibles al menos hoy por hoy. Unificar ambas teorías fue uno los sueños de Einstein y su testigo lo cogió Stephen Hawking hace unos años. Gracias a él hoy en día se considera que lo que podría ocurrir en los bordes de un agujero negro tienen que ver con la mecánica cuántica, dado que no solo absorben sino que son capaces de emitir cierta cantidad de energía. Para poder entender ese pulso energético sería necesario entender cómo la mecánica cuántica y la teoría de la relatividad están relacionadas.

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